Diálogo sostenido este viernes entre el Presidente de la República de Belarús, Aleksandr Lukashenko, y el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz. Autor: Estudios Revolución Publicado: 11/11/2023 | 08:21 am
MINSK, Belarús.- La voluntad de elevar las relaciones económicas y comerciales al mismo nivel de las políticas, y la identificación de nuevas oportunidades de negocios en sectores claves para el país, centraron el diálogo sostenido este viernes entre el Presidente de la República de Belarús, Aleksandr Lukashenko, y el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, quien realiza su primera visita oficial a esta nación como Jefe de Gobierno.
En el encuentro, acontecido en el Palacio de la Independencia, el Presidente belaruso expresó que los vínculos entre ambos pueblos siempre han sido muy cálidos y amistosos, y afirmó que «seguiremos teniendo la misma posición hacia Cuba».
No tenemos discrepancias en el ámbito diplomático, político e ideológico, subrayó Lukashenko; no obstante ---dijo--- es preciso dar un impulso a la cooperación y al intercambio comercial, pues no están al mismo nivel de las relaciones políticas y humanitarias. En ese sentido, propuso revisar de conjunto la relación bilateral, en especial los lineamientos a seguir en materia de cooperación.
Explicó, además, el interés de ampliar la presencia de su país en la región latinoamericana y, en ese propósito, pretenden contar con países amigos como Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Lukashenko insistió en multiplicar las relaciones y, para ello, el comercio bilateral debe ser mayor, en pos de llevar a planos superiores los nexos económicos y de cooperación.
El Primer Ministro cubano, por su parte, agradeció la acogida y aseguró sentirse «como en casa» por las múltiples expresiones de cariño recibidas. Transmitió, además, un caluroso saludo del líder de la Revolución cubana, General de Ejército Raúl Castro Ruz, y del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Marrero Cruz compartió la misma visión sobre la importancia de ampliar los intercambios económicos y comerciales entre Belarús y la Mayor de las Antillas, y propuso desencadenar un grupo de acciones mutuamente beneficiosas que contribuyan con ese objetivo.
Estamos dispuestos a avanzar en las relaciones con la hermana Cuba
El primer ministro, Manuel Marrero Cruz, también sostuvo conversaciones oficiales con su homólogo belaruso, Román Golóvchenko, quien destacó «el carácter abierto y amigable de las relaciones con la hermana Cuba» y significó que «estamos dispuestos a avanzar en esos vínculos».
Luego de la ceremonia oficial de recibimiento en la Casa de Gobierno de la República de Belarús, ambos dirigentes dialogaron sobre el apoyo mutuo en plataformas internacionales, la plena coincidencia en asuntos multilaterales y la condena a las sanciones de Occidente, en especial el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba por el gobierno estadounidense.
El primer ministro, Manuel Marrero Cruz, también sostuvo conversaciones oficiales con su homólogo belaruso, Román Golóvchenko. foto: Estudios Revolución
Sobre el comercio bilateral, aún insuficiente, Golóvchenko apuntó que los índices de este año representan un crecimiento respecto a períodos anteriores, «por lo que se trata de no perder esta dinámica y asegurar su desarrollo en lo adelante».
En cuanto a los sectores con mayores demandas, el Jefe de Gobierno belaruso señaló la maquinaria agrícola y pesada, el transporte de pasajeros, así como el suministro y producción de alimentos. Anunció, además, la ampliación de créditos para la exportación de mercancías hacia Cuba, así como la actualización del Convenio de Intercambio Compensado.
La biotecnología fue otra de las áreas de interés, a partir del reconocimiento internacional de la Mayor de las Antillas. En ese sentido, Golóvchenko hizo referencia no solo al crecimiento en el intercambio de estos rubros, sino a las potencialidades para la producción conjunta de medicamentos.
Para Cuba, añadió el Primer Ministro antillano, la prioridad sigue siendo el sector agroalimentario. Por ello, propuso la creación de una empresa mixta para la elaboración de productos lácteos y cárnicos, a partir de infraestructuras existentes en nuestro país, que hoy están subutilizadas por falta de materias primas. Y la comercialización, detalló, estaría dirigida al mercado nacional y a la exportación.
En breves declaraciones a la prensa, al término de las conversaciones oficiales, el Jefe de Gobierno antillano repasó los temas abordados con su homólogo y precisó que, en base a las prioridades de cooperación identificadas, toca ahora materializar los acuerdos en proyectos concretos que permitan el avance.
El agrado de recibir a verdaderos amigos
La delegación cubana, encabezada por el Primer Ministro, también fue recibida por la presidenta del Consejo de la República de la Asamblea Nacional de Belarús, Natalia Kochanova, y por el presidente de la Cámara de Representantes de la Asamblea Nacional, Vladimir Andreichenko.
Siempre es de mucho agrado recibir a los verdaderos amigos, a quienes nos une una historia común, una amistad fraternal, una cooperación mutuamente ventajosa y el apoyo mutuo en todas las plataformas, expresó Natalia Kochanova al darles la bienvenida en el Consejo de la República.
El Primer Ministro, también fue recibido por la presidenta del Consejo de la República de la Asamblea Nacional de Belarús, Natalia Kochanova, y por el presidente de la Cámara de Representantes de la Asamblea Nacional, Vladimir Andreichenko. Foto: Estudio Revolución
El avance de la comunicación entre los Parlamentos de los dos países centró una parte significativa del debate pues, a su juicio, «en estos tiempos complejos, la voz parlamentaria deber más alta y clara». Al mismo tiempo, llamó la atención sobre la firma de un Convenio de Cooperación con la Asamblea Nacional del Poder Popular, que dará paso no solo a la consolidación de los lazos de amistad, sino a la creación de una Comisión Interparlamentaria.
Natalia Kochanova condenó rotundamente el bloqueo, destacó el buen momento que vive la cooperación económica y comercial y, a su vez, mencionó otros sectores de interés como educación, turismo, y cultura.
En nombre de la Cámara de Representantes habló después Vladimir Andreichenko, quien ponderó las particularidades de los nexos que unen a Cuba y Belarús, sobre todo el alto grado de confianza. Ratificó, además, el apoyo desde el Parlamento a la implementación de todos los acuerdos emanados en el marco de la visita oficial.
A ambos agradeció Marrero Cruz la bienvenida, les expresó el saludo afectuoso del Presidente de la República y del Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y, al escribir en el libro de visitantes, calificó de «fructífero el intercambio, que refleja la unidad entre nuestros países y en especial nuestros parlamentos.
«Son tiempos de unidad. Tanto Cuba como Belarús compartimos que las sanciones de Occidente son una oportunidad para juntos hacer cosas diferentes y avanzar en proyectos para traer más prosperidad a nuestros pueblos», concluyó.
Minutos después, la delegación cubana llegó hasta la Plaza de la Victoria, ubicada en el centro de la ciudad de Minsk, para rendir tributo a los soldados caídos en la Gran Guerra Patria. Ante la llama eterna, en la base del monumento que lleva el mismo nombre del lugar, colocó el Primer Ministro una ofrenda floral. Con rosas también le siguieron los demás integrantes de la comitiva, símbolo del homenaje de un país al heroísmo de los hombres.
Cuba, amor mío
Un encuentro con el movimiento de amistad y solidaridad con Cuba, y con una representación de cubanos residentes en Belarús fue el colofón de la intensa agenda de este viernes.
De las expectativas tras las conversaciones con las máximas autoridades belarusas, de los proyectos concretos identificados en favor de mayor bienestar para nuestros pueblos, y de la tensa situación que atraviesa el país caribeño conversó, en síntesis, el Primer Ministro.
Encuentro con el movimiento de amistad y solidaridad con Cuba, y con una representación de cubanos residentes en Belarús. Foto: Estudios Revolución
Galina Ivanovna Petkench, directora de la Casa de la Amistad, sitio que dio cobija al intercambio, pasó revista a los presentes: miembros de la Sociedad de Amistad con Cuba, personas que participaron en misiones en la isla, integrantes del grupo parlamentario, directivos de centros de Educación Superior…
La amistad con Cuba es transversal a toda la sociedad belarusa, comentó al inicio Santiago Pérez, embajador de La Habana aquí y, poco a poco, cada uno de los participantes lo fue confirmando.
«Cuba vive en el corazón de cada uno de nosotros»; «sigue siendo ese país cercano al que queremos mucho»; «aquí el concepto de amistad no se ha diluido, pese a los años difíciles; «a Cuba se le quiere por su optimismo y firmeza» … una tras otra fueron sucediéndose las frases.
Pocas veces tenemos la oportunidad de decir tanto la palabra compañero y hoy no hemos cesado de hacerlo; eso se lo debemos a Cuba, dijo alguien al final. «Me llevo todo este cariño para el pueblo cubano», se despidió el Primer Ministro.
Con música inició y cerró la velada. La última canción, dicen, es muy conocida en Belarús. Casi todos la tararearon. «Cuba, amor mío», se llama.