CARACAS, agosto 14. — El cuarto ciclo de diálogos de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) fue instalado ayer lunes en Caracas, Venezuela, en medio de la implementación de un cese al fuego bilateral.
«Saludamos estos diálogos y reiteramos nuestro compromiso de apoyar todas aquellas iniciativas tendientes a construir un sólido camino de paz para Colombia», afirmó monseñor Darío Monsalve durante la lectura del comunicado oficial de los países garantes e instituciones y acompañantes del proceso de paz.
A su vez, el jefe de la delegación del ELN, Pablo Beltrán, agradeció al Gobierno venezolano por su apoyo al proceso de paz y destacó que resulta un esfuerzo que «no siempre es bien entendido cuando los aportes se hacen y no son suficientemente valorados».
Por su parte, el jefe de la delegación del Gobierno colombiano, Otty Patiño, subrayó que la paz «debe contribuir a la construcción de un Estado de democracia plena, es decir, un Estado soberano que hace respetar su propia soberanía y las de los demás».
A su vez, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, subrayó que la paz en Colombia significa también la paz para América Latina y el Caribe, mientras recordó que en Caracas se produjeron las primeras reuniones que dieron inicio a los diálogos entre las partes.
En este sentido, recalcó la necesidad de adoptar medidas de alivio humanitario para las comunidades que han sido impactadas por el conflicto armado, lo que, enfatizó, constituye un objetivo «inaplazable y perentorio».
Los anteriores ciclos de diálogos entre el Gobierno colombiano y el ELN se han realizado en Venezuela, México y Cuba.