Casi tres mil personas rescatadas en la provincia de Granma

Casi tres mil personas han sido rescatadas en la provincia de Granma tras el paso del huracán Melissa, un equivalente a 413 operaciones de salvamento, informaron hoy medios locales.

A dos días del paso del meteoro las acciones de recuperación acaparan los titulares de la prensa.

El jefe de Estado Mayor del Ejército Oriental, general de brigada Florencio Navas, vía telefónica con la máxima dirección del país, tras sobrevolar la región en helicóptero, explicó que el poblado de Río Cauto se encontraba rodeado por una gigantesca inundación.

Y agregó que una parte de la vía férrea por donde antes se habían evacuado unas 800 personas estaba bajo el agua, de modo que por el momento resultaba imposible repetir la operación.

El Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel, insistió en actuar con la mayor celeridad posible, en no escatimar esfuerzos ni recursos para preservar vidas humanas y en mantener informada a la población.

La presidenta del Consejo de Defensa en la provincia, Yudelkis Ortiz, comentó a Díaz-Canel sobre una locomotora en camino desde Camagüey, con la intención de evacuar unos dos mil habitantes de Guamo y trasladarlos a Las Tunas, donde evacuaron a unos 1 400 granmenses.

Ante la previsión de que el nivel del agua continuará subiendo en los próximos días, las autoridades provinciales han clasificado la situación como de «alto riesgo».

Para enfrentar la crítica situación generada por las intensas inundaciones en la comunidad Grito de Yara y Río Cauto, se ha desplegado un operativo de emergencia con una orden perentoria: evacuar de manera masiva a los habitantes, refiere en su perfil de Facebook TV Granma.

La dirección del operativo está a cargo del General de Cuerpo de Ejército Roberto Legrá Sotolongo, Viceministro Primero y Jefe del Estado Mayor de las FAR, quien desde Bayamo coordinó las misiones del escuadrón de helicópteros de la Fuerza Aérea del Ejército Oriental.

Las imágenes provenientes de la zona confirman la crudeza del momento, con vastas áreas anegadas, lo que ha hecho imperativo el despliegue de este operativo aéreo y terrestre para garantizar la protección de todos los ciudadanos, refiere el medio.

Los daños para la economía son enormes y también para muchas familias, cuyas pertenencias se perdieron arrastradas por la corriente o yacen inservibles entre el lodo. Pero ahora mismo, la prioridad está en salvar a las personas.