Pablo González Casanova recibe en el Palacio de la Revolución la Orden Félix Varela de primer grado, en enero de 1983. Autor: La Jornada Publicado: 18/04/2023 | 11:21 pm
Ciudad de México, abril 18.— Pablo González Casanova, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el período de 1970–1972, falleció este martes a los 101 años de edad, en Tlalpan, Ciudad de México.
Según publicó el diario La Jornada, González Casanova nació en Toluca, estado de México, el 11 de de febrero de 1922. Fue sociólogo, politólogo e historiador, además miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y acreedor a múltiples reconocimientos y distinciones, entre ellos, el Premio Nacional de Ciencias y Artes 1984.
En paralelo a su trayectoria como funcionario universitario, González Casanova desarrolló otra vertiente fundamental como politólogo, que lo llevó a escribir uno de los libros de mayor influencia en el análisis del sistema político mexicano: La democracia en México.
Hacia mediados de la década de los ochenta, González Casanova fundó en la UNAM el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, donde permaneció durante más de una década.
Abogado de formación, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México, González Casanova, cursó la maestría en Ciencias Históricas en el Colegio de México y posteriormente, a los 28 años, se doctoró en Sociología en La Sorbona. González Casanova tuvo en el seno de la UNAM un ascenso importante desde que en 1953 iniciara su largo camino como universitario al ingresar como secretario general de la Asociación de Universidades.
Sus vínculos con Cuba datan de la década de 1940 cuando comenzó una fructífera relación con Julio Le Riverend, con el que compartió la admiración hacia figuras cimeras del pensamiento sociopolítico antillano como Julio Antonio Mella y José Martí. Pablo formó parte de la hornada de intelectuales mexicanos que se deslumbró con la Revolución Cubana a comienzos de los años 60 —de la que formaron parte Fernando Benítez, Arnaldo Orfila Reynal, Miguel León Portilla, Carlos Fuentes y David Alfaro Siqueiros— y que estampó la declaración de principios «Cuba es el ejemplo actual de América».
González Casanova tuvo un papel decisivo en la articulación de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales «En Defensa de la Humanidad», luego del impacto que generó su llamamiento «A la conciencia del mundo», leído en acto multitudinario en la Plaza de la Revolución, el 1ro. de mayo de 2003, según se reconoció durante el Encuentro Mundial de Intelectuales y Artistas desarrollado en Caracas al año siguiente.
Profundo admirador de los movimientos progresistas de la región —el allendismo chileno, el sandinismo nicaragüense y el chavismo venezolano— González Casanova recibió máximos reconocimientos públicos en correspondencia a su visión intelectual comprometida, como el Premio Internacional José Martí de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y la Orden José Martí de la República de Cuba.