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Luca Zaia, presidente de Véneto, habla con la prensa el domingo, mientras espera los resultados del referéndum de su región. Autor: Reuters Publicado: 24/10/2017 | 09:51 pm
VENECIA, octubre 24.— El Gobierno italiano está dispuesto a iniciar negociaciones con Lombardía y Véneto después de que esas dos ricas regiones votaran el domingo último de forma abrumadora por una mayor autonomía, dijo el primer ministro Paolo Gentiloni.
A diferencia del reciente referéndum independentista en Cataluña, que ha provocado una profunda crisis política en España, los plebiscitos italianos del pasado fin de semana fueron legales, aunque no vinculantes para Roma, refiere Reuters.
Tras señalar que no tenía intención de hacer un drama de las dos consultas en esas regiones, Gentiloni dijo que estaba dispuesto a discutir las pretensiones de Lombardía y Véneto. Hablamos «de cómo hacer que Italia funcione mejor. No estamos poniendo en cuestión Italia y su unidad», afirmó durante una visita a una refinería próxima a Venecia, capital de la región de Véneto, en el noreste de Italia.
«El Gobierno está dispuesto a estudiar los méritos de esto (...) Será un debate complejo, que no puede hacerse en cinco minutos», añadió el primer ministro.
Los gobiernos regionales tienen derecho a pedir mayores competencias en 23 áreas políticas, incluidas medio ambiente, infraestructuras, salud y educación. Se presume que las negociaciones más delicadas serán las de materia fiscal, en tanto Véneto exige disponer del 90 por ciento de los impuestos recaudados en su territorio.
Cinco regiones en Italia —las islas de Sicilia y Cerdeña y tres áreas fronterizas relativamente pequeñas con minorías lingüísticas— ya tienen un estatuto autónomo especial en el marco constitucional. Véneto quiere unirse a ellas; pero para lograrlo tendría que cambiarse la Carta Magna, algo que el Gobierno no parece tan inclinado a aceptar.
«Estamos dispuestos a conceder mayores competencias dentro de los límites fijados por nuestra legislación y por nuestra Constitución», aclaró Gentiloni.
Es probable que las negociaciones se prolonguen durante meses y seguramente se verán interrumpidas por las elecciones generales, previstas para mayo de 2018. Cualquier acuerdo entre el Gobierno y las regiones debe ser refrendado por el Parlamento. Ante la perspectiva de un Parlamento sin mayoría absoluta tras las elecciones, es imposible predecir la formación del Gobierno que continuaría las negociaciones.
Lombardía y Véneto representan algo menos de un tercio de la economía de las 20 regiones italianas y cerca del 25 por ciento de la población. A las regiones del sur, más pobres y menos desarrolladas, les preocupa recibir en el futuro menos fondos si Lombardía y Véneto consiguen quedarse con más parte de su propia recaudación de impuestos.
