El fundador de Wikileaks, Julian Assange. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:06 pm
LONDRES, junio 29.— Julian Assange, fundador de Wikileaks, no se entregará a la policía británica, que inició el proceso para extraditarlo a Suecia, y seguirá en la embajada de Ecuador a la espera de una decisión sobre su solicitud de asilo político, declaró este viernes uno de sus portavoces.
«Julian permanecerá en la embajada bajo la protección del gobierno ecuatoriano mientras se reúnen y se procesan los elementos para su solicitud», dijo la portavoz Susan Benn en una declaración a la prensa frente al edificio donde se encuentra la legación diplomática, en la que el australiano, de 40 años, halló refugio hace 10 días.
Según AFP, Benn precisó que sus abogados aconsejaron a Assange que tenía que «declinar obedecer» a la citación policial para presentarse en una comisaría del centro de Londres este viernes con miras a iniciar su proceso de extradición, tras el vencimiento del plazo de dos semanas fijado por la Corte Suprema.
«Esto no debe considerarse como una señal de falta de respeto. Tanto en la legislación internacional como en la británica las demandas de asilo priman sobre las solicitudes de extradición», explicó.
Mientras continúe dentro de la legación, Assange se encuentra en territorio diplomático y por tanto fuera del alcance de las autoridades británicas, pero la policía ya ha dicho que puede ser detenido en cuanto salga.
La portavoz dijo sin embargo que Assange estaba animado y agradecido por el apoyo que le ha mostrado el pueblo de Ecuador y tantas otras personas en todo el mundo.
El creador de Wikileaks se refugió el pasado 19 de junio en la embajada ecuatoriana para evitar una extradición a Suecia, país que lo requiere para interrogarlo por cuatro supuestos delitos de agresión sexual que niega haber cometido y por los que todavía no ha sido acusado formalmente.
Assange está a la espera de una respuesta sobre su solicitud de asilo político del gobierno de Ecuador, que evalúa si es cierto, como él dice, que es víctima de una persecución política tras la filtración de decenas de miles de documentos secretos de Estados Unidos, país donde podría terminar extraditado y condenado a muerte por espionaje.