Parte de esta ruta es el tramo que inicia en Riobamba y, luego de pasar el poblado de Alausí, el tren comienza a descender hacia la «Nariz del Diablo» con un sistema original de zig-zag cavados en la roca que permiten al tren mediante avances y retrocesos salvar un gradiente de 18 grados. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:21 pm
QUITO, junio 19.— Un gran logro del prócer Eloy Alfaro a inicios del pasado siglo, y en su momento la ruta ferroviaria más difícil del mundo al unir la costa con la cordillera andina ecuatoriana, será entregada completamente rehabilitada en diciembre próximo.
La ruta férrea de 452 kilómetros que unirá la ciudad de Durán, en la provincia costera de Guayas, con Quito a más de dos mil 800 metros sobre el nivel del mar, será entregada tras una restauración capital que implicó prácticamente la construcción total de nuevas líneas.
Desde diciembre próximo, se habilitará para turistas nacionales y extranjeros un crucero sobre rieles, con paquetes turísticos que podrían ser de cuatro días y tres noches y hospedajes en los sitios más emblemáticos de esta ruta que atraviesa la cordillera andina.
Para esa fecha, el ferrocarril trasandino que marcó la obra del presidente ecuatoriano Eloy Alfaro (1942-1912) operará con nueve locomotoras electro-diesel, dos a vapor y 12 auto-ferros, que se incrementarán en función de la demanda de turistas nacionales y extranjeros.
El gerente de la empresa pública Ferrocarriles de Ecuador, Jorge Carrera, explicó que ya existen al menos ocho rutas que funcionan con paseos turísticos, mientras todos los tramos pendientes, están siendo rehabilitados de manera simultánea.
Parte de esta ruta es el tramo que inicia en Riobamba y, luego de pasar el poblado de Alausí, el tren comienza a descender hacia la "Nariz del Diablo" con un sistema original de zig-zag cavados en la roca que permiten al tren mediante avances y retrocesos salvar un gradiente de 18 grados.
Con este sistema, el tren desciende desde dos mil 346 metros hasta mil 860 metros sobre el nivel del mar, yendo hacia atrás y luego hacia adelante, en una oportunidad única de viajar entre abismos y escarpadas montañas que representan un atractivo turístico único.
Muchas vidas se perdieron en la construcción de lo que hasta ahora se considera una obra maestra de ingeniería, hasta que el tren concebido por Alfaro para unir el país llegó por fin a Alausí en septiembre de 1902 y a Riobamba en julio de 1905.
Desde este punto, la construcción fue más fácil. Se llegó a la cota más alta de la ruta a tres mil 604 metros a fines de 1905, y en junio 25 de 1908 el ferrocarril hizo su entrada triunfal en Quito, siendo recibido con grandes homenajes y fiestas populares que duraron cuatro días.
El actual gobierno ecuatoriano del presidente Rafael Correa se comprometió a mantener la planificación y el ritmo de los trabajos, pese a las lluvias que se pudieran presentar por un posible Fenómeno del Niño durante los meses de septiembre y octubre, y potenciar la rehabilitación del histórico Tren de Alfaro.