DAMASCO, mayo 31.— La matanza de 108 personas —incluidos 49 niños— en la ciudad siria de Al-Houleh fue cometida por grupos opositores armados con el objetivo de fomentar una intervención extranjera en el país, aseguró este jueves el Gobierno sirio al conocerse los resultados de una comisión que investigó la masacre.
Al hablar a nombre del equipo investigador creado para esclarecer los hechos, el general de brigada Qasseem Suleiman, atribuyó estos a grupos armados que llegaron al lugar, en coordinación con otros que ya ocupaban el barrio, y que cometieron los asesinatos, reportó PL.
Los resultados de la pesquisa fueron dados a conocer en la sede de la Cancillería ante medios de prensa nacionales e internacionales, y transmitidos por la televisión siria y otros medios en directo.
Suleiman explicó que después del sermón de los viernes se reunieron en el área entre 600 y 700 armados y atacaron —con morteros, armas antitanques y otros armamentos pesados—, de forma combinada cinco puestos de control de las fuerzas gubernamentales en Al-Houleh y simultáneamente otra banda entró al barrio y asesinó a familias completas usando armas cortas y cuchillos.
Qasseem citó a testigos del barrio atacado quienes dijeron que ni en esa ocasión ni nunca las fuerzas gubernamentales entraron a la zona que se mantenía bajo ocupación de las bandas de irregulares armados.
El Gobierno pidió al jefe de la misión de supervisión de la ONU en Siria que examine el sitio de la masacre.
En tanto, el vocero del Gobierno ruso, Dmitri Peskov, reiteró el rechazo a una intervención militar extranjera en Siria, posición que de ninguna manera cambiará a pesar de las presiones.
Peskov respondió así a un reportero que preguntó si el presidente Vladimir Putin está listo para discutir el problema sirio con la canciller federal alemana, Angela Merkel y el presidente francés, Francois Hollande.