BRUSELAS, septiembre 12.— La Unión Europea (UE) realiza esta semana intensas gestiones para impedir que Grecia declare el impago de su deuda y provoque un efecto de contagio a otros países como Irlanda, Portugal, Italia o España.
Según Prensa Latina, el temor a una quiebra del país heleno provocó este lunes un desplome de las bolsas europeas, con fuertes pérdidas de hasta un 5,0 por ciento.
Ante el riesgo de una moratoria del país heleno, los ministros de economía europeos convocaron a una reunión para el viernes y el sábado en Wroclaw, Polonia, país que ejerce la presidencia de turno del Consejo de la UE.
Mientras, técnicos de la Comisión Europea (CE), el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional (FMI) regresaron a Atenas para evaluar si los ajustes del gobierno griego son suficientes para que el país obtenga el sexto tramo del rescate acordado por sus socios.
Presionada por Unión Europea y el FMI, Grecia anunció el domingo nuevos impuestos para todos los dueños de cualquier propiedad inmobiliaria, con el fin de recaudar dos mil millones de euros antes de finalizar el año.
Los recortes se suman al plan de ajuste adoptado el 21 de julio, que prevé privatizaciones, rebajas en los sueldos y gravámenes a algunos servicios.
Las impopulares medidas provocaron este fin de semana protestas en Salónica, la segunda ciudad más grande del país, donde unas 20 000 personas fueron reprimidas por la policía, con saldo de 100 detenidos y varios heridos.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, criticó la decisión de varios países de aplicar recortes sociales para enfrentar la crisis de la deuda.
Muchas de estas medidas conllevan el riesgo de retrocesos potenciales en los derechos económicos, sociales y culturales, advirtió Pillay.