El presidente de EE.UU., Barack Obama, su esposa y sus hijas, visitaron el castillo de Cape Coast, en la costa de Ghana. A sus espaldas, la «Puerta del No Retorno», sitio por el que los esclavos africanos salían encadenados y eran embarcados rumbo a América.
En su primera visita al empobrecido continente, el mandatario norteamericano no se abstuvo de dar consejos y señaló que además de las ayudas externas y sanitarias, es necesario que «los africanos hagan elecciones responsables, y que impidan la difusión de las enfermedades, promoviendo al mismo tiempo la salud pública en sus comunidades y países».