TEHERÁN, mayo 14.— El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, advirtió este lunes que si EE.UU. ataca a su país «se arrepentirá por la dura reacción del pueblo iraní», y dijo que Teherán está preparado para resistir incluso una ofensiva unificada de las potencias occidentales.
Al mismo tiempo, informó ANSA, el gobierno de Irán convocó al embajador suizo en ese país, Philippe Welti, que representa allí los intereses estadounidenses, y exigió la «inmediata liberación sin condiciones» de los cinco diplomáticos iraníes tomados prisioneros por tropas de EE.UU. en Iraq, el 11 de enero.
Los cinco iraníes capturados en Erbil, en el Kurdistán iraquí, fueron acusados por Washington de proveer armas a grupos de la resistencia, pero Teherán insiste en su papel de diplomáticos que cumplían una misión en el consulado local.
La protesta de Irán fue notificada un día después de que Washington y Teherán confirmaron que se reunirán en las próximas semanas para debatir la situación en Iraq.
En referencia a un posible ataque a Irán, Ahmadinejad advirtió, poco antes de partir de Emiratos Árabes Unidos, donde realizó una visita oficial, que «los enemigos son demasiado débiles para pensar en algo de este tipo».
«Si cometiesen este error, la respuesta de Irán sería aún más dura», subrayó.
El vicepresidente de EE.UU., Dick Cheney, aseguró el sábado desde un portaviones en el Golfo Pérsico, que la presencia de la flota norteamericana en el área es un «claro mensaje» dirigido a Teherán.
Pero según Ahmadinejad, Irán «continuará el camino» de sus planes para obtener energía nuclear con fines pacíficos, al contrario de Estados Unidos, y advirtió que «las potencias habituadas a usar la fuerza han comprendido que no pueden impedir el desarrollo de la nación iraní».