Foto: AP Foto: AP Según el primer ministro Ehud Olmert, Israel persigue «acabar con el terrorismo», y según los militares sionistas, su ejército es «el más moral del mundo».
Tomemos nota de lo dicho, y veamos las imágenes: Un grupo de muchachas palestinas de Hebrón, peligrosamente armadas de lápices, libretas y libros de texto, intentan llegar a su escuela. Mas he aquí que los morales soldados israelíes han levantado ilegalmente un punto de control en el camino, y se han visto en la imperiosa necesidad de apuntar valientemente sus rifles contra la multitud de jovenzuelas, que pugnan por hacerse paso. No hay arreglo posible. La seguridad nacional antes que todo.
Por fortuna para «la única democracia de Oriente Medio», las sospechosas adolescentes no cumplieron su objetivo de llegar a la escuela, que por cierto, está igualmente en territorio palestino. Pero la victoria del «más moral...» es relativa: ahí mismo, frente al punto de control, las muchachas reciben la clase, sin temer al fusil.
El soldado, tan demócrata y antiterrorista, sencillamente no comprende.