El fabricante de aviones Airbus, del grupo aeronáutico europeo EADS, informó a BBC que se trabaja en la creación de un avión supersónico que podrá hacer el trayecto París-Tokio en 2,5 horas porque volará cuatro veces más rápido que la velocidad del sonido. La compañía cree que no podrá ponerlo en funcionamiento en vuelos comerciales hasta el año 2050. Ya lo han bautizado como ZEHST (siglas en inglés de Transporte Hipersónico Cero Emisiones). Entre otras cosas, sus creadores destacan que provocará bajas emisiones contaminantes ya que utilizará combustibles biológicos. Volará a 5 000 kilómetros por hora y por encima de la atmósfera. Se elevará unos 32 kilómetros sobre el nivel del mar, frente a los 11 a los que se sitúan los aviones comerciales, y los 18 a los que lo hacía el Concorde, el cual era el único avión supersónico utilizado hasta ahora para vuelos.
Computadoras con apariencia de extraterrestres pueden verse en la IV edición de la Campus Party colombiana que reúne en Bogotá a expertos y aprendices de la tecnología, desde las más básicas, como los editores de texto, hasta los últimos avances en robótica. Según la agencia española EFE, los asistentes enardecen con el overclocking, una técnica que modifica los parámetros de las computadoras para aumentar su rendimiento y velocidad. Sin embargo, es la disciplina del modding —cambiar la estética de las computadoras— la que se ha convertido en todo un clásico del evento. De tal suerte, se ven equipos con forma de cajas militares e inodoros.
El jardinero espacial es un sueño cada vez más real. La germinación de plantas en el espacio ya ha sido probada con éxito. Cada día de nuestra vida necesitamos y consumimos agua, oxígeno y comida para sobrevivir. En la Tierra esto es sencillo, pero no fuera de ella. Se ha calculado que suplir estos tres elementos a los astronautas en una nave espacial supone unos cinco kilos por persona por día. Y eso hay que multiplicarlo por el número de miembros en la tripulación y el de días que dure el viaje. Hasta ahora no hemos ido demasiado lejos. La Luna o la órbita terrestre están relativamente cerca y es fácil suplir a los astronautas con los recursos que necesitan enviándoselos desde la Tierra. Para una misión a Marte de mil días, sin embargo, la carga inicial necesaria sería de 30 toneladas. Y los especialistas dicen que no es viable. Para solucionar este problema, la Agencia Espacial Europea está trabajando en el proyecto MELISSA, Micro-Ecological Life Support SystemAlternative (Sistema Alternativo de Soporte Microecológico para la Vida). «Con residuos orgánicos, se puede obtener: oxígeno, agua y comida», le explicó a BBC Mundo Christophe Lasseur, director del Proyecto MELISSA.
Frase célebre: La inteligencia consiste no solo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica. Aristóteles.