El 55 por ciento de la sangre es un plasma formado por agua, sales minerales, albúmina y diversas proteínas. Cerca del 40 por ciento lo ocupan los glóbulos rojos (entre 4 y 5,5 millones por mililitro de sangre), y el resto lo conforman los glóbulos blancos (entre 4 000 y 10 000 por milímetro cúbico) y las plaquetas (entre 140 000 y 450 000).