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Wang Yi en conferencia de prensa. Autor: China.com.cn Publicado: 08/03/2022 | 08:14 pm
Fue clara la definición que el canciller chino Wang Yi expuso el lunes en conferencia de prensa: «La versión de la OTAN en el Pacífico busca mantener el sistema de hegemonía liderado por Estados Unidos, socavar la arquitectura de cooperación regional centrada en la ASEAN y comprometer los intereses generales y a largo plazo de los países de la región».
Se refería específicamente al nuevo pacto militar de Australia, Reino Unido y Estados Unidos que lleva por nombre Aukus, el cual tiene también un complemento en la alianza de Washington con otras naciones de la región «avivando la rivalidad geopolítica», apuntaba Wang Yi.
Ahí está el Quad (Quadrilateral Security Dialogue/Diálogo de Seguridad Cuadrilateral), considerada la alianza para frenar a China en el Indo-Pacífico, y que integran (otra vez) Australia, el sempiterno Estados Unidos, India y Japón, dicen que para promover la estabilidad en los océanos Índico y Pacífico, pero es claro que surge para defender sus intereses en tan importante zona.
Durante la administración Trump se reactivó y en el 2020 iniciaron maniobras militares, mostrando músculos con el propósito —yo diría inútil— de contener a una China pujante que avanza a pasos acelerados para convertirse en la primera economía mundial, en un futuro bien próximo o inmediato.
Los hechos muestran que Washington provoca al gigante chino, soberano e independiente, y dispuesto a defender sus legítimos intereses en la región. Fundamentalmente lo hace con el tema Taiwán. China reclama soberanía sobre la isla, mientras el Pentágono de manera continua le suministra armas y una y otra vez justifican esa política intervencionista especulando sobre un posible ataque de China a su provincia taiwanesa, buscando erosionar la paz.
Wang Yi sustentó durante la conferencia de prensa la naturaleza diferente, y «no son comparables en absoluto», entre la situación en Taiwán y Ucrania. «Fundamentalmente, Taiwán es una parte inalienable del territorio de China, y la cuestión de Taiwán es completamente un asunto interno de China», subrayó, al tiempo que dijo que «algunas personas, aunque expresan el principio de soberanía sobre la cuestión de Ucrania, han seguido socavando la soberanía y la integridad territorial de China en la cuestión de Taiwán. Se trata de un flagrante acto de doble rasero», denunció.
En lugar de preparar hogueras, en Asia, continental o isleña, se necesita al igual que en todo el mundo, una arquitectura de seguridad equilibrada, eficaz y sostenible, pero Washington empuja las tensiones en cualquiera de los puntos cardinales, en un momento en que, como bien dijo el Ministro de Exteriores chino, existe una situación global tan crítica, en la cual la pandemia de la COVID-19 no ha sido derrotada y se incrementa la crisis ucraniana, «el mundo necesita solidaridad y no división; diálogo y no confrontación», sentenció.
