La economía latinoamericana no solo crecerá este año menos de lo esperado, como consecuencia del azote de la COVID-19: ese decrecimiento será el peor de su historia. Autor: Twitter Publicado: 21/04/2020 | 07:34 pm
SANTIAGO DE CHILE, abril 21.— La economía latinoamericana no solo crecerá este año menos de lo esperado, como consecuencia del azote de la COVID-19: ese decrecimiento será el peor de su historia.
La mayor recesión que haya sufrido América Latina fue anunciada por la secretaria ejecutiva de la Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) Alicia Bárcena, durante la presentación de un informe dado a conocer aquí y que recoge análisis y pronósticos sobre los efectos que la pandemia sobre los países de la región.
Según el documento, la región experimentará una recesión del 5,3 por ciento en su Producto Interno Bruto (PIB) este año. Su peor récord negativo anterior fue en el año 1930.
Bárcena explicó que las causas de tal caída, todas asociadas a la Covid-19, son la reducción del comercio internacional, la caída de los precios de las materias primas, la intensificación de la aversión al riesgo (riesgo país), el empeoramiento de las condiciones financieras mundiales, la menor demanda de servicios turísticos y la reducción de remesas.
El informe también detalla que América del Sur será la zona que más se contraiga con 5,2 por ciento en negativo, mientras América Central registrará un retroceso de 2,3 por ciento y la economía del Caribe, un 2,5 por ciento.
Tal contracción, dictada por el retroceso de la economía mundial, originará un aumento del desempleo que será de 11,57 millones más de personas sin trabajo en toda Latinoamérica y el Caribe. Ello significará que la tasa de desempleo aumentará de 8,1 a 11,5 por ciento, para un total de 37,71 millones de ciudadanos en paro.
Según Telesur, Bárcena puntualizó que ante tal escenario, emerge la necesidad de acceso a financiamiento externo en condiciones de emergencia, lo que tocaría directamente a las puertas de los organismos financieros internacionales.
«Es urgente acceder a recursos financieros con base en un apoyo flexible de los organismos financieros multilaterales. Esto debe ser acompañado de líneas de crédito a bajo costo, alivios del servicio de la deuda y eventuales condonaciones, además de repensar el modelo de inserción de la región», apuntó.
Alicia Bárcena abogó igualmente por que la región dependa menos de manufacturas importadas, que se promuevan redes de producción y que se genere una gobernanza internacional más inclusiva. «Una situación excepcional requiere respuestas excepcionales», Bárcena.