CARACAS, marzo 13.— La alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, rechazó cualquier acción militar en contra de Venezuela y abogó por el diálogo pacífico y democrático en el país.
Al intervenir en una sesión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), Mogherini dijo que «Ninguna acción militar, desde fuera o desde dentro del país, sería aceptable», y agregó que el arreglo en el país «no puede ser, y nunca debería ser, impuesto desde fuera».
La jefa de la diplomacia europea aboga por una alternativa de colaboración internacional para facilitar el proceso político en Venezuela, comentó Telesur en el reporte.
Sus declaraciones tienen lugar cuando el asedio a la República Bolivariana para facilitar una «intervención humanitaria» llegó a límites que rebasan el respeto a los derechos de los ciudadanos, luego del sabotaje continuado al sistema eléctrico nacional mediante un ciberataque que se ha denunciado fue ejecutado desde EE. UU.
En un mensaje en Twitter, el presidente Nicolás Maduro dijo este miércoles que, junto con su equipo de Gobierno, avanzan en los trabajos para consolidar la victoria frente a los ataques. Se han establecido como prioridades restablecer y normalizar los servicios de agua potable —que llegaba este miércoles a varias localidades de Caracas, dijo AVN— de transporte público y la distribución de alimentos.
«Estamos dedicados por completo a devolverle la tranquilidad al pueblo, nuestras prioridades son: consolidar la victoria frente al ataque al sistema eléctrico, restablecer el suministro de agua potable, normalizar el transporte público y garantizar la distribución de alimentos», escribió.
Mientras, los conspiradores de fuera del país que usan a Juan Guaidó para materializar sus planes intervencionistas proseguían su campaña para desacreditar el ejecutivo bolivariano, dando cuenta del trasfondo de su estratagema en la guerra no convencional que aplican contra la nación.
En un mensaje en Twitter, el proyanqui titular de la OEA, Luis Almagro, dijo que es «la crisis energética» la que paraliza los principales servicios en la nación y que ello se debería a «la corrupción, incompetencia y falta de inversión durante muchos años por parte de la dictadura usurpadora».
Este es el discurso que acompaña al sabotaje con el propósito de levantar al país contra Maduro, como trata de hacer el autoproclamado «interino» con sus persistentes llamados a protestar contra la falta de luz eléctrica.