Intervención de Nicolás Maduro en la Cumbre del ALBA realizada en Caracas, Venezuela. Autor: MinCi Publicado: 21/09/2017 | 06:05 pm
El Presidente venezolano, Nicolás Maduro, abrió la sesión de la Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América-Tratado de Cooperación entre los Pueblos (ALBA-TCP). Al dar la bienvenida a los participantes subrayó la importancia de la unidad dentro de la región para enfrentar los actuales desafíos y recalcó que «la palabra clave es solidaridad».
Maduro, ofreció un bosquejo sobre la situación que enfrenta Venezuela desde que el 9 de marzo pasado el presidente norteamericano, Barack Obama, declaró a Venezuela como una amenaza a la seguridad nacional de su país y estableció estado de emergencia nacional para la nación norteamericana.
Es una «decisión vergonzosa que ha sido rechazada y denunciada por muchos pueblos del mundo», afirmó Maduro, al tiempo que agradeció las incontables muestras de apoyo que han recibido el pueblo y gobierno venezolanos desde cada rincón del mundo.
En ese sentido señaló el reciente rechazo de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) cuyos 12 gobiernos que la conforman aprobaron el sábado último, en Quito, una declaración histórica que rechaza la medida de Washington y exige que se derogue ese «decreto ejecutivo e imperial que arremete contra el pueblo venezolano», afirmó Maduro.
Esta, recalcó, «es la declaratoria mas grave que en toda la historia se ha hecho contra nuestro país, además de falsa. Venezuela jamás ha tenido planes para agredir a nadie en los Estados Unidos o de los Estados Unidos. Jamás Venezuela ha agredido a ningún pueblo de América Latina ni del mundo. Jamás ha participado en ejércitos para bombardear ni ocupar pueblos en ningún lugar del planeta, ni ha aprobado invasiones contra ningún país. Nuestra constitución confirma que somos un pueblo de paz».
Al contrario, recordó, Venezuela tiene en algunas ciudades norteamericanas y principalmente, en barrios pobres, un programa especial donde le proporcionan combustible de calefacción a más de dos millones de personas vulnerables de morir congeladas en el frío; un programa, dijo Maduro, que inició el Comandante Hugo Chávez.
Detalló además que Venezuela mantiene relaciones estrechas y positivas con universidades, con movimientos de luchas por los derechos civiles, entre otros grupos sociales. «Estamos en el mejor momento de relaciones con el pueblo de EE.UU. Ese es el camino que tenemos y vamos a mantener».
Con respecto al Ejecutivo de la Casa Blanca, el mandatario bolivariano afirmó que su país siempre estará dispuesto a conversar con el gobierno de EE.UU. para entablar relaciones de respeto, amistad, en un clima franco y de igualdad.
En ese sentido mencionó una serie que medidas que ha tomado en los últimos tiempos para flexibilizar el diálogo con Washington. «Pero solo hemos recibido arrogancia y falsedades». Esa respuesta negativa, reflexionó Maduro, responde únicamente al deseo de Washington de derrocar al Gobierno bolivariano y apoderarse de las enormes reservas de petróleo que posee Venezuela. Y así, afirmó, «torcerle el brazo al mundo entero e imponer la dictadura del chantaje» con nuestras reservas de petróleo.
Pero, remarcó, «el pueblo venezolano está ceñido en fervor patriótico».
Propongo a Obama miseria cero
«Yo estaba en Argentina y fue un día de felicidad aquel en que los Presidentes Raúl Castro y Barack Obama, simultáneamente, cada uno en su patria, hablaron y anunciaron la posibilidad de establecer relaciones Cuba-Estados Unidos, recordó el presidente Nicolás Maduro durante la cumbre extraordinaria del Alba en Venezuela en solidaridad con su país.
Ante los líderes del bloque integracionista el mandatario bolivariano dijo que en realidad fue una gran alegría cuando escuchamos a Raúl ese anuncio, y decir a Obama que había sido un fracaso el bloqueo, y que se había ganado su país un total aislamiento por ese bloqueo».
«Nos pareció maravilloso tal suceso y en esa línea nosotros estamos anotados, de primero en la coexistencia pacífica, la independencia, la democracia, la producción, la paz; nos anotamos de primero en todas las instituciones que sea, en la ONU, en todos los lugares, y hasta en Marte si eso fuera posible».
«Nosotros decimos que no podemos hablar por lo que piensa Obama, pero he dicho bastante en actos y en manifestaciones en las calles junto al pueblo, con el gobierno, que todos los presupuestos, e ideas expresadas en ese decreto injerencista del Presidente Obama, son falsos. Todas las cosas que dijo el General Jefe del Comando Sur hace una semana en el Congreso, todo lo que dijo es falso, ideas falsas, está mal informado acerca de Venezuela, están desinformados sus analistas, y por eso dan ideas alejadas de la realidad. Y los pronósticos dados por el Secretario de Estado John Ferry, están errados igualmente».
Dijo Maduro que anhelaba llegar a la Cumbre de las Américas en Panamá para decir la verdad en los mejores términos, con dignidad, siempre la sincera verdad. Y aclaró: «No saben todo lo que hemos desmontado en enero, queridos hermanos, golpes económicos, intentos de atentados golpistas; dos aviones que iban a meterse en Venezuela, y fueron detenidos los que iban a ejecutar el atentado golpista, y ahora este decreto absurdo de calificar a nuestro país como una amenaza a la seguridad de Estados Unidos».
Maduro expuso que siempre ha dicho que «nuestra victoria es la paz… «He dicho más, yendo a un extremo: si llegara lo que no creo que llegue, una confrontación armada, nuestra victoria sería siempre la paz. Y por eso Fidel y el propio Raúl hablan de la unión cívico militar. Nuestra victoria siempre será la paz. Todos esos conceptos van fortaleciendo y enriqueciendo esta doctrina que va surgiendo ante las nuevas situaciones».
Afirmó igualmente Nicolás Maduro que «Tenemos aquí a la Revolución Cubana, con 60 años de lucha y más. Ellos recogieron las banderas de los mambises que en los campos pelearon por la libertad contra el colonialismo español. Como si ellos hubieran hablado con los mambises.
Y aseveró: «Es como si Chávez hubiera conocido a los soldados de Bolívar. No les permitieron a los cubanos entrar victoriosos a Santiago de Cuba primero y a La Habana después. 60 años más tarde, gracias a la victoria de los rebeldes encabezados por Fidel, sí entraron los ángeles barbudos que bajaron de la Sierra, a Santiago y a La Habana. Y aquí también tenemos a la Revolución Sandinista, por el camino de la paz, del humanismo cristiano, del amor, de…Evo, que representa a Tupac Catari y a Tupac Amaru, casi un milagro…Y aquí están representados asimismo los pueblos africanos, aquí está Haití, recordándonos a Toussant Loubertur, y a Ecuador, los pueblos que con su lucha vencieron y siempre nuestros pueblos en verdad buscaron la paz.
«Y tenemos a Raúl, presidente de la CELAC y allá en La Habana declaramos la doctrina de una tierra de Paz. Como dijo Roosvelt: «Hay que seguir…».
«Y yo digo que hay que hacer con las dos manos, con una combatir y luchar… en todos los órdenes; y con la otra trabajar, sembrar, producir, superar la pobreza, que era de 81 por ciento en 1995, y la miseria de 41 por ciento en esa fecha, y en 2014 de solo 5,4, y ahora buscaremos miseria cero. Propongo a Obama más salud, alimentación, miseria cero, humildemente lo propongo, para el uno por ciento del planeta como dice Fidel que somos nosotros».
Que Obama escuche nuestra voz de paz
«Esperemos que Obama, de manera clara y sincera, escuche nuestra voz de paz, cooperación, avance, prosperidad. Aquí no hay pensamiento único. Pero esa es la gran fortaleza de este momento histórico: la diversidad», expresó el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, casi al final de la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP que se desarrolla en Caracas.
Desde la Revolución Cubana, en 1959, hasta el presente —recordó— ha habido una continuidad en la lucha de los pueblos de América, pese a lo que significó la caída de la Unión Soviética.
De la resistencia de la Revolución cubana —dijo— hubo un resurgimiento de las corrientes y la construcción de nuevas. No solo en Bolivia, Ecuador, Nicaragua y el Caribe, sino también en países como Brasil, Uruguay.
«Y el ALBA es evidencia de eso, de lo que se puede hacer cuando la conciencia moral se activa para las luchas políticas de la región y de la humanidad. Eso tiene más potencia que cualquier bomba nuclear».