BERLÍN, junio 10.— Alemania identificó el viernes la probable causa de la epidemia de diarreas hemorrágicas que dejó 33 muertos en Europa: los brotes de soya (frijolitos chinos) encontrados en un paquete procedente del norte del país, y levantó la alerta contra el consumo de lechuga, pepino y tomates crudos, que acarreó pérdidas millonarias a los agricultores europeos.
Los causantes «son los brotes germinados», anunció ahora Reinhard Burger, director del Instituto Robert Koch (RKI), durante una conferencia de prensa en Berlín de las tres instituciones sanitarias federales que se ocupan de esta crisis, reportó AFP.
Según los análisis, «las personas que comieron estos brotes tienen nueve veces más posibilidades de tener diarreas hemorrágicas y otros signos de infección por la bacteria E. Coli que las que no los comieron», dijo.
El paquete en el que se encontró la bacteria fue hallado en la basura de una familia en la que dos miembros enfermaron infectados por la bacteria, precisó la Oficina Federal para la protección de los consumidores y la seguridad alimentaria de Renania del Norte-Westfalia (oeste).
Alemania apuntó inicialmente a los pepinos españoles como el origen de la epidemia, lo que resultó ser falso.