EL PASO, Texas, marzo 4.— Testimonios en el juicio contra el terrorista internacional Luis Posada Carriles confirmaron que en 1997 recibió fondos de la extrema derecha de origen cubano en Miami, para la cadena de atentados explosivos que sacudieron instalaciones turísticas cubanas ese año.
El abogado José Pertierra, representante de Venezuela en la demanda de extradición de Posada Carriles, precisó que durante el juicio que se desarrolla aquí, el fiscal Jerome Teresinski mostró cómo se financiaron los ataques.
En un artículo escrito para el sitio digital CubaDebate y citado por PL, Pertierra relata que uno de los testimonios lo ofreció Oscar de Rojas, contador de uno de los líderes de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), quien reveló que Arnaldo Monzón Plasencia, miembro de la junta ejecutiva de la FNCA, le ordenó girar por esa fecha miles de dólares a Ramón Medina, uno de los seudónimos de Posada Carriles en El Salvador y Guatemala.
Luego le tocó el turno a Oscar Vega, quien desde el año 2005 investiga el caso de Posada Carriles a nombre de la Oficina de Asuntos Contraterroristas del FBI (Buró Federal de Investigaciones). El agente detalló las transferencias electrónicas de dinero desde Nueva Jersey a Ramón Medina en El Salvador en 1997, algunas enviadas por el director de la junta ejecutiva de la FNCA, Arnaldo Monzón.
Al ser interrogado por Teresinski, Vega señaló que en el expediente constan 21 envíos de fondos al terrorista, todos realizados justo en los días de los ataques con bombas en hoteles cubanos, una de las cuales mató al joven turista italiano Fabio Di Celmo.
Posada Carriles enfrenta cargos por fraude, obstrucción de procesos y falsas declaraciones a funcionarios de inmigración de Estados Unidos, luego de entrar a ese país como indocumentado. Sin embargo, no es juzgado por su prontuario criminal contra Cuba y otros países latinoamericanos.