CUMANÁ, Sucre.— El General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, afirmó la tarde de este jueves aquí que los países miembros de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) tienen el privilegio de contar con un modesto esquema integrador, construido sobre bases y principios de igualdad, cuya naturaleza niega las prácticas que originaron la actual crisis mundial.
Fue Raúl el primer orador de la Cumbre Extraordinaria del ALBA, luego de que el presidente venezolano Hugo Chávez, en su condición de anfitrión, diera la bienvenida a los mandatarios de los países que integran este mecanismo integracionista latinoamericano y caribeño, y a los que asistieron en calidad de invitados especiales.
Fue Raúl el primer orador de la Cumbre, luego de que Chávez diera la bienvenida a los mandatarios que participan en la cita integracionista Los jefes de Estado asistentes a la Cumbre se pronunciaron enérgicamente contra la exclusión de Cuba de ese foro y la negativa de los Estados Unidos de levantar el bloqueo impuesto a nuestro pais En su breve pero contundente discurso, Raúl resaltó la «particular significación de los trabajos que venimos llevando a cabo los países miembros del ALBA, más Ecuador desde noviembre de 2008, para crear el Sistema Único de Compensación Regional de Pagos (SUCRE), que será un factor fundamental para fomentar el comercio y la integración económica entre nosotros».
Uno de los resultados de esta nueva Cumbre resultó precisamente la firma de un Acuerdo Marco del SUCRE, minutos antes de que Chávez invitara a sus homólogos a poner punto final a las sesiones de trabajo de este jueves, para irse a un encuentro con el pueblo de Cumaná que desde «hace varias horas nos espera en la Plaza Antonio José de Sucre, en el Parque Ayacucho».
Con la rúbrica de este acuerdo, dijo el Jefe de Estado venezolano, estamos iniciando la construcción de un espacio nuestro, de una unidad de cuenta común, imprescindible para seguir avanzando, bajo los principios de la integración, la solidaridad y la complementación que defiende el ALBA.
Las razones del por qué nuestros países no tienen otra opción que la unidad para enfrentar los embates de la actual crisis mundial, provocada por el capitalismo salvaje, las expuso el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba, cuando expresó que «nuestras naciones no tienen la capacidad, por sí solas, de transformar estructuralmente el orden económico internacional, pero sí el poder de sentar nuevas bases y construir sus propias relaciones económicas».
Mucho se habló en esta nueva cumbre presidencial del ALBA sobre la actual crisis económica y la necesidad de seguir preparándonos para enfrentarla. Como bien plantearon los mandatarios asistentes al encuentro, nuestros países no pueden aceptar en ningún caso que las respuestas, las soluciones o los caminos a recorrer vengan del Fondo Monetario Internacional, ni de otras instituciones financieras.
Esta es la cumbre de nuestros pueblosHoy comienza en Trinidad y Tobago la Cumbre de las Américas. Imposible no hablar del momento en que tiene lugar y de lo que ella representa en un escenario donde la América cambió.
En ese sentido, Chávez inició la cruzada contra ese foro, poniendo sobre las íes los puntos que lleva, al considerar que debe ser la última, al menos con ese formato. Esta es la Cumbre de nuestros pueblos, aquí está nuestro compromiso, afirmó.
Los presidentes de los países miembros del ALBA se pronunciaron de manera enérgica contra la exclusión de Cuba de ese foro y la negativa de los Estados Unidos de levantar el bloqueo impuesto a nuestro país por más de cuatro décadas.
Conmovedoras y muy reconfortantes resultaron las palabras de todos y cada uno, en especial las del presidente de Honduras, José Manuel Zelaya, y del Primer Ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit, quienes dejaron bien claro que Cuba es parte del sistema de las Américas. «Dejarla fuera sería injustificable e imperdonable».
La Cumbre de las Américas, apuntó Skerrit, tiene que cambiar su enfoque y su dirección hacia Cuba. Nosotros vamos a ser parte de las voces que se van a escuchar en contra de la exclusión de la Isla.
Zelaya, por su parte, se refirió al hecho de que asociarse al ALBA es un símbolo de libertad, es romper cadenas, es volver a creer que hay esperanzas en este mundo. Tiene fundamentos que están dando resultados extraordinarios.
Cuba siempre ha sido un símbolo para todos los que soñamos con un mundo más justo, expresó el mandatario hondureño. En nuestra reunión anterior celebrábamos el Aniversario 50 de la Revolución Cubana, y hoy estamos conmemorando 48 años de la victoria de su pueblo en Girón. A Cuba, mi reconocimiento y mi solidaridad, apuntó.
Las propuestas de EvoMomento emotivo de la Cumbre Extraordinaria del ALBA fue escuchar a Evo, el presidente de Bolivia, quien llegó a este encuentro luego de ganar una gran batalla en su país, a favor de su pueblo. Aunque la ocasión fue propicia para rememorar los días en que estuvo de huelga y denunciar los intentos de asesinato contra su persona, dedicó la mayor parte de su intervención para hablar de los grandes retos que tienen por delante los países miembros del ALBA, los cuales no pueden permitirse que los enemigos de las revoluciones y de nuestra gente ponga en peligro la construcción de una sociedad diferente, mejor, que se preocupe y ocupe de las inmensas mayorías excluidas durante años.
Tomando como referencia lo sucedido en Bolivia, Evo propuso la creación del Consejo de Derechos Humanos del ALBA para denunciar semejantes acciones y defendernos.
Otra de sus propuestas estuvo vinculada con Cuba. Con esa humildad que le caracteriza, pidió permiso para darle lectura a una suerte de Declaración de los Países amigos de la Isla que participarán en la Cumbre de las Américas, en la cual exigirán el levantamiento inmediato del bloqueo impuesto por sucesivas administraciones norteamericanas.
Si Obama, dijo, quiere tener el apoyo de todo el mundo, como lo tiene Cuba, tiene que respetar las resoluciones de las Naciones Unidas, tiene que levantar el bloqueo.
En otro momento, Fernando Lugo, presidente del Paraguay, uno de los invitados especiales de la Cumbre, señaló que en América estamos en una nueva época, «somos genuinos autores de nuestro destino y ningún país en el mundo nos puede juzgar. Nosotros creemos en la integración».
La primera jornada de la Cumbre Extraordinaria del ALBA, que tuvo como sede al Museo de Arte Contemporáneo de Cumaná, confirmó, primero, que solo la unidad entre nuestros pueblos permitirá seguir avanzando en la construcción de la gran Patria que soñó Bolívar; y, segundo, Cuba cuenta no solo con el apoyo y la solidaridad de los países miembros de este mecanismo integracionista, sino también de la inmensa mayoría de las naciones del mundo.
Casi en los finales de esta primera jornada, y rompiendo el protocolo de las cumbres, el compañero Raúl agradeció esas infinitas muestras de admiración y respeto hacia la Revolución Cubana y su pueblo.
Luego de exponer ante la Cumbre las razones del por qué la Isla fue expulsada de la OEA, y la larga historia de agresiones de que ha sido objeto por parte de Estados Unidos, Raúl expresó que «sabemos que el mundo entero, a excepción del Gobierno norteamericano y su principal aliado Israel, y algún que otro país, en otros momentos, el planeta entero condena el bloqueo.
Le hemos mandado a decir a Estados Unidos que estamos dispuestos a discutir con ellos sobre todos los temas, dijo Raúl, pero siempre con apego total a la autodeterminación del pueblo cubano.
Entre los temas sobre los cuales Cuba está en condiciones de conversar con el Gobierno de Estados Unidos, añadió el Presidente cubano, se encuentran el injusto encarcelamiento de los Cinco Héroes, cuyo único delito fue el de luchar contra el terrorismo y defender a su pueblo de agresiones como la de Girón; así como también sobre la situación actual de los supuestos disidentes políticos.
Si quieren la libertad de esos «disidentes», entre los cuales se encuentran algunos terroristas confesos, suelten a nuestros cinco jóvenes, y nosotros les mandaremos a los «disidentes» con sus familias.
Por último, y en respuesta a una idea expresada por el presidente Evo Morales, Raúl aseveró que si a Bolivia la expulsaban de la OEA por defender a Cuba, entonces Cuba y Bolivia formaremos otra cosa.
La colocación de una ofrenda floral, con parada militar en la Plaza Antonio José de Sucre, en el Parque Ayacucho, de la ciudad de Cumaná, resultó ya en la noche de este jueves otro momento inolvidable de la jornada. Allí los esperaba el pueblo para dar a los presidentes del ALBA la bienvenida y el saludo de la gente que cree que un mundo mejor es posible.
Este viernes continúan los debates de la Cumbre Extraordinaria del ALBA.