Los jóvenes ratificaron el compromiso de seguir juntos por las sendas que grandes hombres como él iluminaron e iluminan para seguir luchando contra el imperialismo, y por la Venezuela nueva
CARACAS, Venezuela.— La juventud venezolana, bolivariana, martiana y latinoamericana ratificó la noche de este miércoles, aquí, su compromiso con las batallas que se están dando, ahora mismo, en Venezuela y en nuestro continente, para acabar con el imperialismo y construir una Patria grande y nueva.
Fueron la Gala Fidel, siempre Comandante, y la Sala Ríos Reyna, del Teatro Teresa Carreño, el momento y el lugar elegidos por las nuevas generaciones de la hermana República Bolivariana de Venezuela para enviar un mensaje a los que piensan que el proceso revolucionario que late acá y en la región se detendrá.
«Fidel, la juventud venezolana seguirá sus pasos para construir una revolución bolivariana firme, en nuestro pueblo y en todos los pueblos de América Latina. Mantendremos las ideas suyas, junto a nuestro Comandante Chávez, en la lucha por la independencia definitiva del hombre y para que la vida continúe en el planeta».
Las hermosísimas palabras de María Rosa Jiménez, presidenta del Instituto Nacional de la Juventud (INJ), en medio de un homenaje de altísimo vuelo al pueblo de Cuba y su Comandante en Jefe, dejaron bien claro que «la batalla que le toca dar a esta y todas las generaciones que vienen, la asumiremos con entrega, firmeza, sentimiento, amor, solidaridad, internacionalismo, como nos han enseñado usted y otros grandes hombres de nuestra historia».
Fue un regalo «fino, fino», como suelen decir los venezolanos cuando las cosas, los acontecimientos, la vida, alcanza un estadio lo más cercano posible a la perfección. Desde su música más tradicional, su tambor, sus cantores, sus poetas, desde lo más auténtico de su corazón, nos trajeron esos inigualables Versos Sencillos de nuestro José Martí y esas inconfundibles letras de nuestro Silvio Rodríguez.
Cuando pareció que ya habíamos experimentados los más hermosos sentimientos, llegaron la llanera venezolana y el son cubano para sellar el abrazo entre dos pueblos hermanos.
La Sala Ríos Reyna vibró también con la voz y las imágenes de Fidel, en todas sus facetas. No fue una gala formal. Fue la ratificación del compromiso de seguir juntos por las sendas que grandes hombres como él iluminaron e iluminan para seguir luchando contra el imperialismo, y por la Venezuela nueva, la Latinoamérica nueva, el mundo nuevo.
La juventud venezolana estuvo acompañada de la Ministra del Poder Popular para la Participación y Protección Social, Érika Farías, representantes de las estructuras de dirección del Frente Francisco Miranda, de la Embajada de Cuba en Caracas y de cooperantes de la Isla aquí.