«Buena salud significa riqueza», afirmó el primer ministro de Malasia, Dato Seri Abdullah Ahmad Badawi, al término de su visita al Instituto de Oftalmología Pando Ferrer, de la capital cubana, donde elogió el sistema de salud cubano.
El máximo dirigente malayo realizó un recorrido por el hospital, en el cual pudo apreciar las nuevas tecnologías adquiridas por el país para el diagnóstico y tratamiento de diversas patologías que afectan la visión, entre ellas la catarata y el glaucoma, así como recibió detalles del trabajo del centro, a partir de las explicaciones ofrecidas por su director, Marcelino Ríos Torres.
El destacado oftalmólogo dijo a los visitantes que desde el 2004, año que se inició la Operación Milagro, Cuba ha operado de la vista a 295 991 pacientes de más de 25 países de América Latina y el Caribe, así como a 79 828 cubanos.
El visitante malayo felicitó al Instituto por sus logros, y expresó el deseo de que Cuba continúe con tan buenos resultados en el sector de la salud, así como hizo una invitación al director del centro para que visite su país, y así propiciar alguna cooperación e intercambio de experiencias.
Además opinó que no sólo es importante el equipamiento para tratar algunas enfermedades, sino hacer énfasis en la prevención, pues los tratamientos pueden ser muy caros y si las dolencias se detectan a tiempo se benefician aquellos sectores de la población con menos recursos económicos.
Malasia entrega en esta Cumbre a Cuba la presidencia del Movimiento de Países No Alineados, en este sentido el primer ministro malayo significó que los Estados en desarrollo enfrentan hoy muchos problemas económicos y sociales.
«El reto es que el Movimiento sea más eficaz, aumentar la colaboración, y tener una mayor voz e influencia en la correlación de fuerzas actuales en el mundo», dijo finalmente.