El canciller Wirayuda dialoga con nuestros galenos en Prambanan. El Ministro de Relaciones Exteriores de Indonesia, Hassan Wirayuda, visitó el Hospital Integral de Campaña de Prambanan, donde agradeció la valiosa contribución realizada por la Brigada Médica Cubana en la asistencia a las víctimas del terremoto de mayo pasado.
El embajador cubano, Jorge León, transmitió al alto funcionario el mensaje enviado por el Presidente Fidel Castro, que expresa sus condolencias por las víctimas y daños causados por el maremoto del 17 de julio.
Asimismo, León elogió la estrecha cooperación establecida con la cancillería, así como con las autoridades del gobierno y la salud, y reiteró la disposición de la brigada de brindar ayuda donde fuera necesario.
Durante su estancia en la instalación, Wirayuda recibió una llamada telefónica del presidente de su país, Susilo Bambang Yudhoyono, quien transmitió un agradecimiento especial por el mensaje de condolencia y un saludo entrañable al Comandante en Jefe Fidel Castro.
El jefe de la Brigada cubana, doctor Luis Oliveros, informó al jefe de la diplomacia indonesia acerca del trabajo desempeñado por el colectivo cubano que, hasta ese momento, había atendido más de 45 000 pacientes.
Visiblemente emocionado, el canciller reiteró el eterno reconocimiento que conservará el pueblo indonesio por este gesto solidario, para el que la distancia no constituyó una barrera.
Posteriormente, el señor Wirayuda recorrió las áreas donde el personal médico presta sus servicios y comprobó la satisfacción de los pacientes al conversar directamente con ellos y sus familiares.
La Brigada Médica Cubana ha realizado más de 850 intervenciones quirúrgicas; cerca de 2 000 javaneses han sido inmunizados contra el tétanos, y la mortalidad materno-infantil se mantiene en cero.
Java ha sido sacudida, en menos de dos meses, por tres terremotos de notable intensidad y un tsunami que trajo consecuencias mucho más devastadoras al centro y sudeste de la isla. Uno de los más recientes movimientos telúricos provocó la muerte de poco más de 500 personas y dejó sin hogar a 23 000 pobladores.