Ningún equipo es fácil hasta que le ganas

El equipo nacional de fútbol masculino de Cuba tendrá dentro de muy poco una prueba doble que definirá su futuro a corto y mediano plazo. Los dos partidos ante Barbados y Guadalupe, que cierran su participación en el grupo A de la división B, perteneciente a la Liga de Naciones de Concacaf (CNL, por sus siglas en inglés), significa para los Leones del Caribe la posibilidad de obtener el pasaje al circuito A y también un boleto directo a la Copa de Oro 2023, con todo lo positivo que eso pueda implicar.

Previo a este momento definitorio para el plantel, Juventud Rebelde conversó con Pablo Elier Sánchez, técnico que desde 2020 viene trabajando con la escuadra y bajo cuya tutela hemos visto cómo progresa una selección que durante mucho tiempo compitió muy por debajo de sus posibilidades reales.

«Los próximos partidos definirán la evolución de lo que hemos hecho, más allá de lo que puedan significar para la Liga de Naciones y la Copa Oro. El resultado sobre la cancha es la mejor forma de valorar cómo un equipo ha mejorado y estos duelos son la manera que tenemos de reunir a los muchachos y conseguir cosas que nos permitan demostrar lo que hemos avanzado.

Ahora llegamos de forma diferente y hemos tenido que hacerlo con mucha conversación constante con los muchachos para que hagan lo que queremos en dependencia de su forma y rendimiento», analizó Sánchez.

Para el manager oriundo de Pinar del Río, el llamado teamwork viene del nivel de los jugadores y no del tiempo de preparación, pues ningún club entrega a sus atletas durante demasiado tiempo y por tanto es necesario optimizarlo al máximo.

Afortunadamente, más allá del nivel deportivo de sus discípulos, Pablo Elier ha confesado que la principal fortaleza de este proceso ha sido el sólido vínculo que se formó entre varias generaciones de jugadores cuyo compromiso con su idea futbolística es absoluto.

«La selección, de una forma paulatina y bien pensada, ha ido sumando gente de talento e insertando a sus jugadores en ligas de nivel. Queremos que los muchachos se muestren y vayan a lugares de competitividad mayor. Una de las cosas que hemos logrado es que gente que ha jugado en Premier League se compenetre con muchachos jovencísimos de la liga nacional.

Pero más allá de eso, estamos buscando que los jugadores sean responsables, que sepan que la única forma de dar el salto de calidad ahora y de aspirar eventualmente a ir al Mundial pasar por estar conscientes de que cada paso que demos es con ese sentido. Tenemos que lograr que eso esté en su mente, pues los obstáculos a veces solo viven ahí y después de tanto tiempo creo que ahora los menos complicado.

El equipo lo vamos a ir perfeccionando. El tiempo y los ciclos nos van a ir dando ese rodaje necesario. Tenemos la materia prima, la fluidez y consolidar la selección. Hay que consolidar posiciones, modificar perfiles de jugadores excelentes para que el conjunto tenga la mayor cantidad de talento allí en la cancha y hemos tenido éxito hasta ahora. Esperamos que esta próxima fecha FIFA sea el último escalón para enfrentarnos a mejores equipos y un medidor», declaró.

Dos vecinos «peleones»

«Los barbadenses tienen técnico nuevo, pero mantienen su núcleo común. Además, juegan sin presión en casa y eso nos puede complicar la situación», apunta Sánchez, quien opina que ningún equipo es fácil hasta que se consigue el resultado final, que siempre es ganar. Para él da igual si hoy marcas diez goles porque mañana puedes perder. «El equipo más débil del mundo se te encierra y si no sabes descifrarlo fallas en conseguir tu meta».

Según nos explicó, en el duelo previo ante Barbados que terminó 3-0 a favor de los cubanos, estos tuvieron mucha posesión y oportunidades, pero eso no quiere decir que tengan una ventaja ahora. Desde su punto de vista, la solución saldrá el próximo 23 de marzo sólo después de jugar y demostrar la superioridad después de 90 minutos en el Wildey Turf, la casa de ellos, en donde nadie ha podido anotar más de un gol.

Por otra parte, el elenco Guadalupe la historia es diferente. Cuba cayó ante ellos (1-2) en la jornada de apertura de la competición, lo cual dejó, al decir del coach vueltabajero, una espina en sus muchachos, quienes ahora actuarán como locales el 26 de marzo en la cancha santiaguera Antonio Maceo.

«Fueron condiciones difíciles de juego, el terreno estaba en malas condiciones, lo cual provocó errores, incluido uno que costó un gol. Ese es el partido que determina todo y a eso se suma todas las ganas que tenemos de revancha», expuso el vueltabajero.

Pablo Elier conoce a su rival. Sabe que juegan fuerte y tiene jugadores altos, pero que son superables desde la táctica. «Hemos mirado el primer choque y aunque iremos convencidos a por la victoria, no hay exceso de confianza ni nada parecido. Hemos estudiado en busca de perfeccionar el rendimiento al máximo e ir a resolver temprano el partido», aclaró.

Armando el «muñeco»

En este caso, igual que en todas las fechas FIFA, a cada técnico le toca conformar una nómina lo más fuerte posible que le permita no solo ganar partidos sino, en la medida de las posibilidades probar nuevas variantes de cara a los próximos retos importantes.

«Cada convocatoria está conformada en primer lugar buscando la forma de darle continuidad a los que han estado en el proceso, pues ya están más identificados con esta idea futbolísticas. A partir de ahí nos interesa continuar la dinámica desde las eliminatorias seguir buscando los mejores resultados.

Esta vez tendremos varias bajas como la del lesionado Onel Hernández, razón por la cual hemos buscado variantes que se asemejen a nuestra idea y respetando sobre todo a aquellos que logren adaptarse mejor al grupo que tenemos. de jugadores experimentados con veteranos e inyección de jóvenes talentosos en buena forma. A partir de ahí, lo que queremos es tener posesiones y tocar la pelota, tener orden, ofensiva sin balonazos, que sea un fútbol intencionado y no a partir de la casualidad.

Orientamos estar trabajando con los jugadores sobre estos duelos, analizar lo que hicimos antes lo que significan. Estamos de primeros y dependemos de nosotros. Aparentemente las condiciones están creadas para clasificar, pero no es nada fácil. Tenemos jugadores lesionados y con molestias, o que han declinado estar con la selección ahora, lo cual nos rompe los planes de alguna forma», contó el profe.

Para el próximo reto doble, Sánchez confirmó que tendrán dos días de entrenamiento antes del encuentro, a diferencia de otros momentos en que solo han tenido poco más de 60 minutos el día antes para preparar las cosas, factor que les ha hecho tener malos resultados en sus debuts en diferentes torneos.

«Más allá de esta convocatoria en específico, es agotador este trabajo de técnico, pues tenemos que darle continuidad a los jugadores, no solo los que entrarán en la lista de 23, sino a otro grupo más grande que llega hasta los 37 entre Cuba y el extranjero», reveló Pablo Elier.

«Con los jugadores de fuera hay posibilidad de ver todo lo que hacen que nos permiten tener videos y estadísticas para procesar su rendimiento en los equipos de las principales ligas. Mientras, con los locales tenemos que remitirnos a conversaciones directas, a la ayuda de programas como Fútbol x dentro y otros colaboradores que nos permiten estar al tanto de su participación en el juego, goles, capacidad individual y desarrollo.

¿Se sueña o no con el 2026?

Con el cambio de formato de la Copa del Mundo, que ahora admitirá hasta 48 representativos, la Concacaf tendrá tres cupos directos y otros dos para el repechaje intercontinental, lo cual abre nuevas posibilidades de clasificación para selecciones que usualmente no contaban en absoluto.

«Hay que mirar lejos. No es que pensemos desde ya en el Mundial sin terminar el trabajo inmediato, pero es algo muy relacionado. Por ejemplo, si ascendemos a la Liga A de la CNL y vamos a Copa de Oro, damos el paso a un nivel que nos permitiría, casi que nos obligaría, a superarnos para poder competir en las eliminatorias con más partidos de alta exigencia como colectivo».

Estos duelos ante Barbados y Guadalupe que tenemos pronto nos sirven para exigirnos de cara al futuro que viene. Si vamos sumando, por qué no podemos luchar contra los equipos del área. Hay que aprovechar este ciclo inicial para crecer en las rondas iniciales, cumplir metas intermedias y llegar a las siguientes rondas más fuertes», dijo a JR Sánchez desde su casa en Pinar del Río, un lugar en donde no puede estar tanto como le gustaría.

«El tiempo que paso aquí es poco y, como ahora, es activo en función del trabajo: hablando con el cuerpo técnico, con jugadores, funcionarios de la federación. Aparentemente estamos libres pero obligados por la responsabilidad. La familia tiene que apoyarnos y aunque no siempre aceptan idealmente cada cosa que me toca hacer, es lo que uno ha elegido y el sacrificio se entiende y sin ellos no tiene sentido, porque ellos hacen que valga la pena».

Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana