Matanzas y Las Tunas han jugado tres partidos reñidos. Foto: István Ojeda Autor: Itsván Ojeda Publicado: 07/01/2020 | 09:12 pm
Otra vez los Cocodrilos han prendido las ilusiones de sus hinchas, perdidas el año pasado en lo más profundo del pantano con un inexplicable lugar 16, después de siete años coqueteando con una corona que se les esfumaba de las mandíbulas cuando más apretadas parecían.
Con su victoria de ayer ante los vigentes campeones nacionales de Las Tunas por 5-3 tras remontada en el sexto inning, los matanceros de Armando Ferrer —vio el juego y verá el de hoy fuera del banco como castigo por su actitud antideportiva el domingo— se han puesto a un solo triunfo de acceder a la gran final.
El equipo de mejor diferencial de carreras (CA-CP) en la temporada (+170), fue, sin embargo, el único de los cuatro semifinalistas con más derrotas que victorias en los juegos decididos por una o dos anotaciones (16-19). El dato preocupó más a los parciales de los Rojos luego del resultado del sábado.
Pero domingo y martes, en situaciones semejantes, supieron imponer autoridad en el terreno, controlaron las emociones y ganaron ambos partidos por diferencia de dos carreras para relanzar la candidatura al trono que no suben equipos matanceros desde el milenio pasado.
Ayer, el pitcher zurdo Yamichel Pérez, invicto con los Cocodrilos durante la segunda fase en calidad de refuerzo, volvió a demostrar su buen momento, pese al cambio de rol en el staff. De casi seguro tercer hombre en la rotación, se ha convertido en un seguro matador con par de salvamentos.
Si en el bando de los tuneros no había dudas de que Yander Guevara (7-6 en la temporada y 12-8 en play off) iba asumir la apertura, su rival sorprendió a quienes esperaban a Noelvis Entenza, pero dicen que Yosvani Torres pidió la bola y en juegos de esta envergadura esa actitud casi siempre se recompensa con el «cógela, es tuya».
Torres es un veterano pinareño con saldo de 15 éxitos y 13 derrotas en partidos de postemporada, que no se anda con miedos cuando de tirar pitcheos por la zona de strike se trata, y uno detrás del otro, como una máquina, para reducir el tiempo de reacción de los bateadores.
El derecho de Vueltabajo no pasó del cuarto capítulo (3.1, 2CL, 5H, 2K y 1BB) y fue remplazado por Entenza un inning después que el hombre que más veces ha impulsado el empate o la ventaja desde que se lleva esa estadística, Danel Castro, le pegara imparable con hombres en segunda y tercera para voltear momentáneamente la pizarra. Danel es maestro en esos momentos, como si no tuviera nervios.
Una vez más pisaron la goma los Leñadores en el medio juego con remolque de Yordanis Alarcón, antes de la reacción matancera en el sexto, cuando sacudieron cinco hits, combinados con un boleto a Erisbel Arruebarrena. Lo más loable fue que con dos outs hilvanaron seguidilla de cuatro de esos cohetes, para fabricar las últimas cuatro carreras de la tarde ante los envíos de los relevistas Carlos Santiesteban (perdedor) y Yoalkis Cruz.
Lo demás resultó colgar ceros hasta el ponche de Yuniesky Larduet que marcó el out 27 para los dirigidos por Pablo Civil, quien lo más probable es que dependa hoy de su as en la rotación, Carlos Juan Viera, para buscar el empate en el duelo. El zurdo Yoanni Yera es la presunta carta de Ferrer para seguir soñando con la gloria.
Y mientras los ojos siguen posados en la postemporada, Mayabeque y Villa Clara designaron sus nuevos directores para la próxima campaña: Michael González pasa del line up al banquillo con los Huracanes y el coach de banca en los dos últimos torneos, José Antonio García, asume las riendas de los Leopardos. La noticia lamentable la puso Holguín con el anuncio de que no celebrará torneo provincial por falta, fundamentalmente, de pelotas, según una nota colgada en la edición web del periódico Ahora.