Lorenzo se despidió con una plusmarca universal. Autor: Armando Hernández Publicado: 21/09/2017 | 06:16 pm
El nadador Lorenzo Pérez había tenido una participación excepcional en los Juegos Parapanamericanos Toronto 2015. Ya había ganado un título y un metal plateado en el Centro Acuático de la urbe canadiense, donde este miércoles implantó un nuevo récord mundial en los 100 metros estilo libre, categoría S6, para despedirse con una segunda corona del certamen.
Su tiempo de 1:04.60 minutos fue inalcanzable para el campeón universal este mismo año, el colombiano Nelson Crispín (1:06.17), hasta entonces dueño del mejor registro de América. Sin validez quedó también la marca del sueco Anders Olsson (1:05.45) impuesta en Reykjavik hace seis años.
Mientras, sobre la pista de la localidad de York continuó la estela dorada del atletismo cubano en esta cita, que ya va por siete coronas y 17 preseas en total.
La «molienda» comenzó esta vez por intermedio de Ernesto Blanco, el mejor en la vuelta al óvalo para los concursantes de la categoría T46, con marca para el certamen incluida. Blanco estampó un crono de 49.07 segundos en una prueba en la que su compatriota Ettiam Calderón (50.21) se colgó la presea de bronce.
Más brillo aportaron a la fecha —la más productiva hasta el momento— los velocistas de la comitiva. Por un lado, la multilaureada Yunidis Castillo aportó el primero de sus esperados cetros, al imponerse en el hectómetro, categoría T47, con tiempo de 12.49 segundos. Lo mismo hizo Leinier Savón en los 200 metros T12, al detener los relojes en 22.06 segundos, y Omara Durand añadió a su récord mundial y triunfo en los 100 metros T12, el éxito ahora en los 400 metros de la misma categoría, con tiempo de 56.96 segundos.
Además, el propio Savón (6,62 metros) acaparó un subtítulo en el salto largo, categoría T11/12, en la que Johannis Lastre (6,60) terminó tercero. El otro premio de la jornada, de color plateado, correspondió a Lázaro Zamora (37,72 metros) en el lanzamiento del disco, categoría F46.
Por su parte, el judo se estrenó con la medalla de bronce de Sergio Pérez en la división de 66 kilogramos B2.