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El lanzador Carlos Yanes ha sido uno de los «históricos» del béisbol pinero. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 05:24 pm
NUEVA GERONA, Isla de la Juventud.— Ante la debacle en el desempeño del conjunto pinero al inicio de la LI Serie Nacional de béisbol, muchos pensaron en la posibilidad de eliminar a la Isla de la Juventud del principal torneo cubano. Sin embargo, el cierre fue bastante halagüeño y esperamos que así sea el futuro.
Pero no es la intención de este reportero hacer comparaciones o analizar las posibles proyecciones de Armando Jonson y su equipo, sino ofrecer a los lectores, datos que demuestran que la historia del béisbol cubano también está signada por la impronta de algunos hijos de esta tierra, y muchas de sus hazañas todavía están vigentes, elementos aportados por los hermanos Ariel y Armando Iglesias, del Departamento de Estadísticas y Anotación de la Comisión Municipal de Béisbol.
Empecemos por Alexander Ramos, camarero con el récord de más partidos jugados de manera consecutiva (1112), hecho que habla a favor de la consagración al deporte y amor a la camiseta; Carlos Yanes, otra leyenda del béisbol nacional y segundo mayor ganador de por vida, es el atleta con más series jugadas del país (un total de 28).
El antesalista Michel Enríquez todavía ostenta la marca de más sencillos conectados en una Serie, con sus 152 en la campaña 38. Además, mantiene la superioridad en dobles durante una campaña, con los 39 que disparó en la edición 48 de nuestros clásicos beisboleros.
Orlis Luis Díaz, otro excelente pelotero, colocó su nombre en la historia luego de impulsar 87 carreras en la Serie 40, un récord que perduró siete años hasta que el santiaguero Alexei Bell lo elevara hasta 111.
Por último, Danny Aguilera igualó la pasada temporada la marca de 27 juegos salvados impuesta un año antes por el cienfueguero Dunier Ibarra. Este registro cobra mayor relevancia teniendo en cuenta que solo cuatro lanzadores cubanos han logrado «rescatar» más de 20 partidos en una misma campaña.
Desde que se instauraron, la Isla de la Juventud —un municipio cuyo 63 por ciento de su población cabe en el estadio Latinoamericano—, ha clasificado en siete ocasiones para los play off. No pueden decir lo mismo otros equipos como Holguín (tres), Guantánamo (cuatro), Cienfuegos (cuatro), Las Tunas (tres) y Metropolitanos (dos).
Asimismo, en las últimas 13 ediciones (sin contar la más reciente) los equipos pineros han cosechado un tercer lugar (serie 38), dos sextos (41 y 45), un séptimo (40) y tres octavos (39, 43 y 48); o sea, en más del 70 por ciento de su participación durante ese período ocupó lugares nada despreciables. Solo en las últimas tres campañas se nota un descenso en el desempeño.
Puede parecer poco, pero es notable si se conoce que la Isla de la Juventud tiene que escoger sus talentos entre una población de solo 87 000 habitantes. Y es obvio: no todos juegan pelota.
