Los Mundiales suelen ser el mejor escaparate para la exhibición de jugadores. Muchas veces, su último pitazo se convierte en disparo de apertura para el mercado de fichajes veraniegos.
Pero esta vez el Barcelona español se robó la arrancada, anunciando la inminente contratación del internacional David Villa, hasta ahora jugador del Valencia.
Asimismo, el club catalán parece dispuesto a repatriar a Cesc Fábregas desde el Arsenal inglés, en una operación que supondría la salida del Yaya Touré hacia el Emirates Stadium. Guardiola también pudiera prescindir del francés Henry —con posible destino en Estados Unidos— y del central mexicano Rafa Márquez.
Mientras, se espera por el anuncio que oficialice el despido del chileno Manuel Pellegrini como técnico del Real Madrid. Ello despejaría el camino a la posible llegada del portugués José Mourinho al Santiago Bernabéu.
El polémico entrenador del Inter italiano dio este martes una conferencia de prensa y evitó responder sobre su futuro inmediato. Sin embargo, adelantó que si deja al club lombardo sería «por no sentirme respetado futbolísticamente en un país donde he tenido muchos problemas».
Mourinho se ve aún lejos de dirigir a nivel de selecciones, pero muchos lo consideran como el heredero de técnicos que han hecho historia en varias latitudes.
Quizá el más emblemático entre ellos ha sido el serbio Velibor Milutinovic, que ha llevado hasta las citas universales a cinco selecciones diferentes. El «Mago» Bora, quien será ahora ayudante de Radomir Antic en el banquillo de los serbios, debutó con México en 1986. Luego, prosiguió su exitosa carrera al frente de Costa Rica (1990), de Estados Unidos (1994), Nigeria (1998) y China (2002).
Otro «nómada» ha sido el brasileño Carlos Alberto Pariera, ahora como timonel de los anfitriones sudafricanos. Antes de consagrarse con la verdeamarelha en 1994, Parreira dirigió a Kuwait (1982) y a los Emiratos Árabes (1990). Después asumió el mando de Arabia Saudita (1998) y retomó al «Scratch» en 2006.
Hasta ahora en todos los Mundiales disputados, al menos una selección ha sido dirigida por un técnico extranjero. En Sudáfrica serán 12 las escuadras bajo el mando de foráneos, entre ellas Camerún, Costa de Marfil, Ghana y Australia, las únicas que siempre han confiado su suerte a las tácticas de un «extraño».