De izquierda a derecha: Manuel Hurtado López (Teatro), Darién Orlando Peña Prada (Poesía), David Martínez Balsa (Narrativa), José Alejandro Cantallops Vázquez (Ciencia Ficción y Fantasía) y Armando López Carralero (literatura Infanto-Juvenil). Foto: Roberto Suárez Autor: Roberto Suárez Publicado: 30/04/2022 | 08:50 pm
Cuando se coloca el grafito sobre la hoja y comienzan los primeros trazos, el autor lanza rumores, ideas —a veces inconexas—, y les permite crecer. Se inicia así la siembra, el riego, la orfebrería. Ascienden las ambiciones y se destapa el dique de la creatividad. En este punto el escritor no puede parar. Es el autómata que nunca había imaginado, creando mundos completos y coherentes, con diversas y profundas especulaciones sicológicas.
La pasión, el trabajo continuo y la extenuante revisión, revierten lo seco y amorfo, volviéndolo manantial. Primero leen amigos, luego jueces. El murmullo se generaliza. Los aplausos son cortos hasta que aparece en escena la obra publicada.
Cada año la Asociación Hermanos Saíz (AHS), con el coauspicio del Instituto Cubano del Libro y la Casa Editora Abril, otorga los premios Calendario. El propósito es enaltecer parte del mejor talento joven; ese que no deja de germinar en esta nación.
Escribió el poeta John Donne: «Nadie es una isla, completo en sí mismo; cada hombre es un pedazo de continente, una parte de la tierra…». Por ello dentro de las actividades de cada Feria Internacional del Libro —el evento literario más importante del país— se premia a aquellas parcelas, aquellos islotes creativos que tributan sus universos al invaluable legado de la cultura cubana.
Para esta edición, un prestigioso jurado evaluó más de cien obras en concurso en las diferentes categorías y destacó la labor de varios jóvenes que recibieron premios y menciones. Entre los galardonados estuvieron David Martínez Balsa (Narrativa), por la novela Triple C; Darién Orlando Peña Prada (Poesía), por Bestia contextual, y Manuel Hurtado López (Teatro), por su obra El padrino.
Asimismo, Lázaro Abrahan Pérez Suárez (Ensayo) recibió el lauro por Mucho, señora, daría… Las fibras eróticas de José Martí; José Alejandro Cantallops Vázquez, con El tapiz del tirano, obtuvo el Premio de Ciencia Ficción y Fantasía, y Armando López Carralero mereció el máximo reconocimiento por Duende del agua en la categoría de literatura Infanto-Juvenil.
En medio de esta fiesta de letras, Juventud Rebelde conversa con los principales protagonistas de la velada.
«En El tapiz del tirano intenté representar el papel del tirano, pero desde el punto de vista griego, donde todo el Gobierno se centra en una persona, pues se confía en ella. No es el concepto que se tiene hoy sobre un dictador militar. La novela es una tragedia mezclada con asesinato. Se centra en la tejedora de tapices Elina, protagonista de la historia, que decide ultimar al tirano Kerion. Al avanzar la trama ella va percatándose de que no es un tirano desde el sentido negativo, sino que se acerca más a esta definición griega, y las consecuencias que traería matarlo», explica José Alejandro Cantallops Vázquez.
El jurado destacó que en 17 años de existencia, esta es la primera ocasión que se alza con el Calendario una obra de fantasía histórica. «No es un género muy popular en Cuba, pero me atrae muchísimo. Hay una mezcla de ambientación griega con las ciudades italianas del siglo XVI, época de la condotta. También me apoyo en el pensamiento de Nicolás Maquiavelo, pero no ese de “el fin justifica los medios”; sino el Maquiavelo que concebía a este Príncipe, o gran líder, preocupado por su pueblo, pero que no debe trascender a la democracia. Debe cederla».
Mi manera de ver el mundo
En Poesía, Bestia contextual, de Darién Orlando Peña Prada, se llevó puros elogios de un jurado integrado por Nancy Morejón, Arístides Vega Chapú y José Luis Serrano: «El texto revela el nacimiento de un poeta cuya expresión rinde tributo, con una impresionante voluntad de estilo, a las formas métricas tradicionales de la poesía española, en particular del soneto cuya factura es, como se sabe, un verdadero reto a la creación literaria desde tiempos medievales».
«Mi forma artística de expresarme es la poesía. La mayoría de los libros publicados en la actualidad se basan en el verso libre y la prosa poética. Esa sería la gran diferencia de mi obra respecto a otras. Bestia contextual habla de las cuestiones internas que me han instigado durante varios años: la manera de ver el mundo, a mi país», declara Peña Prada.
«Estoy muy contento con este premio y esta oportunidad que entrega la AHS», prosigue el poeta trinitario. «Se publica por la Casa Editora Abril, una de las más prestigiosas del país. Tiene un sistema promocional que llega a todas partes del territorio nacional y eso es muy bueno para autores inéditos como yo».
En décima y romance
En este sentido Armando López Carralero, galardonado en la categoría literatura Infanto-juvenil, coincide con su colega poeta: «Es el premio soñado por los escritores jóvenes del país, el mayor al que puede aspirar cualquier literato de hasta 35 años en Cuba y eso es muy importante para nuestras carreras».
Respecto a su libro, Duende del agua, López Carralero comenta que es un texto escrito en décima y romance, dirigido a toda la familia, no solo a los más chicos y jóvenes: «El tema recurrente es el agua como símbolo de lo cotidiano. Posee la voz, la mirada, las inquietudes y las percepciones de cualquier niño del mundo», concluye.
Mi narrativa es realista
En la categoría de Narrativa el máximo galardón fue para la novela Triple C, del escritor David Martínez Balsa, Premio David 2017 en Cuento.
«Triple C es un texto de realismo ubicado en una unidad militar. La novela explora el tema del bullying y sus efectos tanto en el abusador como en las víctimas. Se desarrolla en plena pandemia. La historia parte de un joven abusado durante la enseñanza secundaria que regresa a esta unidad militar como un sargento instructor, dedicándose a atormentar a los muchachos que abusaron de él en el pasado. Mi narrativa es realista, se centra mucho en la sicología de los personajes. Me gusta introducirlos en determinadas situaciones y ver cómo esto los afecta», expresa Martínez Balsa.
Una historia familiar
«Un texto maduro, con una investigación de base muy consistente que se aventura dentro de una arriesgada estructura que yuxtapone historias, planos temporales, realidad, ficción y autoficción, logrando unificar las interacciones entre narrativa, evocación, acción performance y documentación con fluidez y coherencia», así valoraron Eberto García, Marcel Méndez y Yuddalis Favier, jurados de Teatro, la obra El Padrino.
Su autor, Manuel Hurtado López, explica que su argumento versa sobre conflictos internos asociados a su familia: «Esta obra es mi tesis del Instituto Superior de Arte (ISA). Es una investigación sobre un tema que fue tabú en mi familia: el asesinato de mi padrino (un crimen pasional). Me centré en escudriñar qué había sucedido con él y la relación de mi padre, su mejor amigo, con ese tema.
«El premio significa mucho para mí porque cierra el proceso que comencé en el seminario de dramaturgia del ISA. Representa todo lo que aprendí de mis profesores y de toda una tradición asimilada de la autoficción (tema central en el texto). Es un homenaje también para Sergio Blanco, para mi tutor, José Alegría, que me ayudó a concluir ciertas lagunas que tenía la estructura».
Los títulos ganadores de la presente edición de los premios Calendario serán publicados en la próxima Feria Internacional del Libro bajo el sello de la Casa Editora Abril. Solo resta un merecido trabajo de promoción que le permita a estos jóvenes talentos crecer dentro del universo literario.