El caricaturista Antonio Nerilicón durante su conferencia sobre el humor gráfico en México. Autor: Adán Iglesias Publicado: 21/09/2017 | 04:58 pm
Con un recorrido por la historia de la caricatura mexicana del siglo XX, Antonio Nerilicón inició el período de conferencias programadas para el Taller Internacional de Humor gráfico e Historieta.
Por él supimos que a partir de 1984 se acuñó en su país el término de monero para referirse a los caricaturistas. Por esa fecha los dibujantes de La Jornada se autodenominaron Los moneros de La Jornada. En ese país mono es sinónimo también de muñequito.
Nerilicón —dibujante editorial de El Economista desde 1991— confesó que dicho calificativo le desagrada, pues siente que minimiza su labor: «A los siquiatras no se les llama loqueros» argumentó desde una de las aulas del Instituto Internacional de Periodismo José Martí.
En otro momento de su charla contó que en su país el personaje más dibujado es Fidel Velázquez (1900-1997), líder de la Confederación de Trabajadores de México por más de cincuenta años.
«A Velázquez le gustaba verse reflejado en la prensa. Él solicitaba los originales con el propósito de coleccionarlos. Tanto lo dibujaron que se aburrió de contar los dibujos cuando estos alcanzaron la cifra de 1 000», comentó.
Otro muy caricaturizado fue el dictador Porfirio Díaz, quien respondió a las críticas con cárcel para los dibujantes y editores. También cerró los talleres donde se imprimían esas publicaciones.
La situación cambiaría cuando, al inicio de la Revolución mexicana, el presidente Francisco Madero permitió una apertura a la libertad de prensa. «Pero los humoristas aprovecharon para hacer de Madero blanco de sus dardos gráficos» explicó Nerilicón, Premio Nacional de Periodismo en 1997.
Según Nerilicón, el destacado muralista mexicano José Clemente Orozco (1883–1949) fue primero caricaturista y luego se consagró a la pintura.
«La mayoría de los pintores han querido ser humoristas gráficos, y al verse frustrados terminan en la pintura», ironizó.
Antonio Nerilicón es autor de la trilogía política El Economista, Kafkatitlán y Con la pluma desenvainada. En los años 1997 y 1998 animó sus caricaturas para el noticiero Hechos Meridiano.
Sobre la situación que en la actualidad viven los humoristas gráficos en México, explicó que cada vez hay menos medios donde trabajar.
Este martes, las conferencias serán impartidas por el mexicano Arturo Kemchs y el peruano Omar Zevallos, director de la revista digital Arte-facto.
Al concluir la charla, Zevallos inaugurará una exposición suya de caricaturas personales.