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Hazaña que inspiró al cineasta Rogelio París, director del drama bélico, cuya premier tuvo lugar la víspera en la sala Charles Chaplin, de la capital
El internacionalismo le es consustancial a los cubanos. Innumerables muestras de entrega desinteresada de nuestro pueblo a lo largo de estos 50 años de Revolución lo confirman, pero sobresale la lucha infatigable y el arrojo demostrado por los cubanos hasta conseguir la plena independencia de la hermana Angola.Una de las páginas más gloriosas de esa epopeya la constituyó la notable resistencia que opuso un reducido grupo de combatientes cubanos y angolanos a la UNITA, en Cangamba. Fue justamente esa hazaña la que inspiró al cineasta Rogelio París, director del drama bélico Kangamba, cuya premier tuvo lugar la víspera en la sala Charles Chaplin, de la capital.
Coproducción del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos y el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR), Kangamba es, a decir de Omar González, presidente del ICAIC, una película de afectos, más que de efectos. «No se trata de una película de guerra, sino de hombres y mujeres envueltos en una situación de guerra.
«Kangamba se diferencia del mucho cine efectista y metrallero, especialemnte el hollywoodense, que tanto daño hace al mundo, y a nosotros los cubanos, que lo padecemos como una epidemia», dijo González en esta presentación, a la que asistieron el miembro del Buró Político Abel Prieto, y Fernando Remírez de Estenoz, integrante del Secretariado del Comité Central, entre otras altas personalidades.
Protagonizada por Armando Tomey y Rafael Lahera, en este filme, que será estrenado en todo el país el 2 de octubre, también participan reconocidos actores como Samuel Claxton, Alexis Díaz de Villegas, Félix Beatón, Linnet Hernández, Herón Vega, Renny Arozarena y Omar Franco.
