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Socudef trabaja con el propósito de lograr que todas las personas hagan uso de su derecho a decidir sobre su salud sexual y reproductiva de manera informada, consciente y voluntaria. Autor: Cortesía del entrevistado Publicado: 02/04/2021 | 12:32 pm
En Cuba, son muchas las historias de parejas que han logrado tener hijos gracias a los servicios de reproducción asistida, las de mujeres que deciden si desean tener hijos o no, las de los tantos esfuerzos que se hacen para prevenir infecciones de transmisión sexual o las maneras atractivas con que se llevan las temáticas de salud sexual a la adolescencia.
Nuestro país —no sin grandes retos por delante— cuenta con experiencias muy positivas en estos terrenos. Asegurar el bienestar de la población ha estado siempre como una de las principales metas, sobre todo con un enfoque de género, dándole a la mujer el poder sobre su cuerpo y su vida. Estas verdades son reconocidas tanto a nivel nacional como internacional, pero pocos conocen que detrás de las felices anécdotas está la mano de la Sociedad científica cubana para el desarrollo de la familia (Socudef).
Con el propósito de lograr que todas las personas hagan uso de su derecho a decidir sobre su salud sexual y reproductiva de manera informada, consciente y voluntaria, Socudef —fundada en 1978 por iniciativa de Vilma Espín— ha permitido que parte de las familias cubanas planifiquen y desarrollen proyectos de vida apegados a sus realidades y sueños, seguros de que cuentan con la atención médica para ello.
«Desde sus comienzos, la Sociedad ha liderado las acciones relacionadas con la planificación familiar, mediante un trabajo indisoluble con sectores e instituciones nacionales con el objetivo de informar, orientar y capacitar tanto al personal de la Salud como a todas las personas para fomentar la salud sexual y reproductiva», comenta la doctora Mercedes Piloto Padrón, presidenta de Socudef.
La Sociedad ha acompañado y mantenido un vínculo esencial durante años con los servicios del programa materno infantil, los de promoción de Salud, entre otros, aportando su granito de arena para que estos tengan una base científica fuerte que les sirva de apoyo, y también para que generen contenidos que puedan ser consultados por profesionales nacionales y foráneos, explicó.
Hoy, en el difícil contexto de la COVID-19, Socudef no ha cesado su empeño de contribuir al desarrollo de estos servicios integrales de calidad para todas las personas y propiciar la información actualizada sobre dichas temáticas. Ello se constata cuando vemos los ínfimos números de muertes maternas, la gran salud de la que gozan los recién nacidos y la atención y educación integral que reciben los y las adolescentes.
En el recién aprobado Programa nacional para el adelanto de las mujeres, se dedica especial atención al cuidado de la salud sexual y reproductiva, asignatura en la que Socudef ha trabajado en Cuba por 43 años. Enfocada también en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible, la sociedad promueve el acceso pleno a los servicios de salud, así como la posibilidad de acompañar el desarrollo de las familias con un enfoque de derechos humanos, apegados a la inclusión de los distintos modelos familiares.
