Las amputaciones por úlceras del pie diabético (UPD) en Cuba se han reducido en más de cuatro veces gracias al Heberprot-P, novedoso producto biotecnológico cubano, único de su tipo a nivel mundial, indicado para el tratamiento de pacientes con estas lesiones en estado avanzado.
Así lo dio a conocer este jueves en conferencia de prensa el Doctor Manuel Raíces Pérez-Castañeda, secretario científico del Congreso Internacional Heberprot-P Habana 2012, que se celebrará del 12 al 14 de diciembre de este año en el Palacio de Convenciones, en La Habana.
Según el especialista, hasta el 7 de septiembre de este año un total de 13 765 pacientes de todo el país han sido beneficiados con el medicamento, disponible actualmente en 47 hospitales y 197 policlínicos. Asimismo —dijo— el producto se ha aplicado satisfactoriamente en 81 014 pacientes de más de 20 países.
El Doctor Manuel Raíces puntualizó que durante la cita de diciembre próximo especialistas de todo el mundo debatirán sobre las terapias de cicatrización de úlceras complejas y la disminución del riesgo de amputación, a través de la implementación de programas nacionales, provinciales, municipales o locales de atención integral a pacientes con UPD.
En el caso de Cuba —puntualizó— se reflejará el impacto médico y económico de la extensión de la terapia Heberprot-P en el programa de atención integral a pacientes cubanos.
El experto informó que el programa del evento incluye una actividad precongreso, los días 10 y 11, que no es más que un curso-taller dirigido a los especialistas internacionales que deseen acceder a los procedimientos que permiten la aplicación práctica del medicamento en las heridas de pacientes con UPD.
En el mundo actualmente padecen de diabetes 300 millones de personas, y alrededor de cuatro millones de ellas murieron en 2007 por desórdenes relacionados con el control del azúcar, según la Fundación Mundial de la Diabetes.
Más de la mitad de los pacientes diabéticos no pueden mantener controlados sus niveles de glucosa, ni con dietas, medicinas y ejercicios, incrementándose así el riesgo de padecer de complicaciones como la ceguera, fallo renal y las amputaciones por UPD.