Latir al compás del paso de revista

Al compás del Himno Invasor, el mismo ritmo de batalla que unió a las generaciones de 1868 y 1895, marcharon este sábado los más de 2 200 estudiantes de las instituciones docentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), durante las prácticas de la Revista Militar que tendrá lugar el próximo 16 de abril, como un sentido homenaje al aniversario 50 de la Proclamación del Carácter Socialista de la Revolución, la Victoria Militar de Playa Girón y especialmente a todos los jóvenes que, por más de medio siglo, han dado y expuesto su vida al servicio de la Patria.

Desde horas tempranas los cadetes, guardiamarinas y camilitos demostraron sus destrezas militares a lo largo de más de un kilómetro de distancia, en la pista del aeropuerto de Ciudad Libertad, el mismo que guarda la memoria de los bombardeos del 15 de abril de 1961, como preludio del ataque imperialista por Playa Girón.

Ordenadas en siete bloques, realizaron las prácticas las escuelas interarmas de las FAR General Antonio Maceo, la General José Maceo, y el Instituto Técnico Militar José Martí, todas Orden Antonio Maceo; así como las escuelas militares Camilo Cienfuegos de La Habana, la Academia Naval Granma y la Escuela Superior Comandante Arides Estévez.

Los estudiantes fueron seleccionados desde el mes de octubre, cuando quedaron constituidos los diferentes bloques que, a partir del 15 de enero, comenzaron a trabajar, sin que se afectase el proceso docente educativo.

Desde entonces cada jornada requiere de gran entrega. Ellos entrenan por las tardes, dos y tres veces por semana, incluyendo los sábados.

«Es un gran esfuerzo, pues dividimos nuestro tiempo entre el estudio y las prácticas, pero vale la pena, y me siento orgullosa de hacerlo», aseguró Mileysi Bravet, estudiante de onceno grado de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos.

«Si miras a tu alrededor todos somos jóvenes, porque somos justamente nosotros quienes tenemos la responsabilidad de mantener y demostrar a todo el mundo que ya llevamos 50 años de Revolución Socialista y que sí se puede», comentó la joven.

Refirió que la juventud está dando el paso al frente, como en su momento lo dieron los moncadistas, los milicianos, los alfabetizadores, los combatientes internacionalistas… y como ahora lo hacen los miles de médicos cubanos que trabajan en Haití, Venezuela y en otras partes del mundo.

Con ello coincide la cadete María Lourdes Márquez, de la Escuela Militar Superior Comandante Arides Estévez, al enorgullecerse de su generación, como protagonista de un desfile que va a representar al pueblo uniformado de Cuba, en fecha tan significativa del pasado, el presente y el futuro del país.

«Es un regalo también para el Comandante en Jefe, como reflejo de todo lo que ha hecho posible en esta Revolución, y los jóvenes sabremos ser fieles continuadores del legado de las generaciones históricas», aseguró.

Medio siglo de historia y juventud

Para estos muchachos, lo más importante es la disciplina, el sentido de pertenencia, el amor, el patriotismo y sentir cada paso de marcha como un latido propio.

El cadete José Antonio Macías, también de la Escuela Militar Superior Comandante Arides Estévez, señaló que en cada paso que dan están representando a todos los cubanos que, a lo largo de estos 50 años de Revolución, han velado por la seguridad nacional.

«Estamos preparados para acometer nuestro rol histórico», subrayó. Como joven cubano y militar, José Antonio aseguró que el principal reto que enfrentan hoy las nuevas generaciones es precisamente mantener la Revolución, pero no como una consigna, sino desde el batallar continuo de las dificultades diarias.

Señaló la importancia de acompañar y ser protagonistas en el proceso de actualización del sistema económico y social del país, sin perder el camino inicial que marcó el Comandante en Jefe.

¡De frente, march…!

Para los más jóvenes el esfuerzo es mayor. Los estudiantes de las escuelas militares Camilo Cienfuegos se enfrentan por primera vez a una Revista Militar de esta magnitud y sienten la gran responsabilidad que tienen al realizarla.

Adrián García, estudiante de onceno grado, confesó que acometer esta marcha no es cosa fácil. «Nosotros lo damos todo en cada práctica. Nuestra palabra clave es la fidelidad a la Revolución, y este ejercicio es parte de esa constancia».

Contó que en ocasiones se quedan hasta horas de la noche estudiando para poder dedicar tiempo a los ejercicios de las prácticas y mantener buenos resultados académicos, «pues la dirección del país cuenta con nosotros y no los defraudaremos», insistió.

Sobre las características de esta Revista, el general de brigada Béiler Frómeta, director de la Escuela Interarmas de las FAR General Antonio Maceo, explicó que es ante todo un honor que las FAR sean representadas por sus centros docentes, pues dice mucho de la confianza y la responsabilidad que se les atribuye a las nuevas generaciones.

«A estos jóvenes los caracteriza su disciplina, el entusiasmo, su acometividad y la organización en la ejecución de las prácticas, a pesar de la preparación fuerte que están realizando», comentó.

Durante las jornadas de prácticas, un momento emotivo es la competencia que se establece entre los diferentes bloques, para elegir a los que con mayor destreza y marcialidad realizan los ejercicios militares.

Entre los parámetros que identifican a los mejores está la marcialidad, la disciplina, la correcta alineación de las escuadras durante el paso de revista, así como la altura del pie, y lograr un ángulo de inclinación de la cabeza de 35 grados durante la vista derecha.

Sin dudas marchar no es cosa sencilla. Quienes hemos participado alguna vez en una compañía de ceremonias recordamos que lograr un paso con firmeza y marcialidad requiere de un esfuerzo y constancia elevados. Solo así se puede sentir y marcar una única cadencia, como un latir constante entre cada combatiente.