Cuba defiende la paz como requisito indispensable para el desarrollo de todos los pueblos del mundo.
Durante más de medio siglo nuestro pueblo ha sido víctima de las agresiones de los gobiernos de los Estados Unidos que lo ha obligado a invertir incontables recursos y energía. Ha sido firme y tenaz en la defensa de la soberanía del país y apoya los esfuerzos de la ONU y su lucha por la paz.
Una parte de nuestro territorio está ocupado por la fuerza desde hace más de 100 años y nunca Cuba ha intentado ni intentará usar la violencia para recuperarla. Su política exterior es conocida y reconocida por la comunidad internacional.
Surge en este instante una crisis que inquieta a los pueblos, originada por las noticias de los combates que estallaron en el Cáucaso, en la frontera al Sur de Rusia.
Al desintegrarse la URSS, Osetia del Sur, anexada por la fuerza a Georgia, con la cual no compartía nacionalidad ni cultura, conservó su condición de república autónoma con sus autoridades locales y su capital Tsjinvali. Al amanecer del 8 de agosto, Georgia, en complicidad con el gobierno de Estados Unidos, lanzó sus fuerzas contra Osetia del Sur intentando ocupar la capital, lo cual anunció públicamente el mismo día en que se inauguraban los Juegos Olímpicos en Beijing.
Es falso que Georgia esté defendiendo la soberanía nacional.
Las tropas rusas estaban legalmente en Osetia del Sur como fuerza destinada a garantizar la paz como conoce la opinión internacional; no cometieron ninguna ilegalidad.
La solicitud de una retirada previa de los invasores es justa y nuestro gobierno la apoya.
Cuba, amenazada por las fuerzas de Estados Unidos, no puede, como una cuestión de principios, aceptar un alto al fuego sin la retirada de los invasores. Si fuese atacada por fuerzas extranjeras jamás admitiría tal tipo de alto al fuego.
Raúl Castro Ruz Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros
La Habana, 10 de agosto de 2008