J.R: Tuve una relación muy bonita con quien creí el amor de mi vida, pero por razones del destino nos separamos. Ahora está lejos y no lo veré más. Hace dos años estoy sola y no he logrado encontrar un hombre que me pida una relación seria. Cuando creo que va a funcionar, fracaso. No tengo suerte porque todos quieren tener solo sexo. Quiero volver a amar. Lo peor es que no puedo estar sola. No sé qué hacer. ¿Qué pasa con los hombres? ¿Seré yo la culpable de lo que me sucede? ¿Podré encontrar quien me ame y no me tome solo para sexo? Tengo 20 años.
¿Si aspiras al amor por qué aceptas compañía de quien no te ofrece una relación seria? Al parecer entre amor y compañía prefieres esta última, tanto como ellos elijen el coito fugaz más que una relación duradera. No se trata solo de que te tomen o no para el sexo, sino de la posición en que te ubiques tú misma.
Es difícil encontrar el amor o ayudar a que surja si te sientes compulsada a aceptar propuestas sin valorarlas, solo para estar acompañada. Quizá debas detenerte a buscar las razones que te llevan a aceptar proposiciones sin que exista el compromiso amoroso que buscas.
Podría suceder que, sin quererlo, propicies con tu comportamiento el distanciamiento de quienes ya han intimado contigo, y resulta difícil comprender el modo en que estamos condicionando nuestra suerte. Te sugiero que acudas a una consulta profesional personalmente.
No hay mucha sorpresa en que un hombre quiera un encuentro carnal y una mujer desee ser tomada como un valioso ser digno de amor. Subjetivamente, existe un eterno desencuentro entre la posición masculina y la femenina.
Hombres y mujeres se confrontan eternamente. Pero ello no impide que se atraigan, entrelacen y amen. Tú no tienes que ser la excepción.
Mariela Rodríguez Méndez. Máster en Psicología y consejera en ITS y VIH/sida.