Los que soñamos por la oreja
En la historia del rock en Cuba, un capítulo de suma importancia lo han escrito los fanzines, pequeñas publicaciones a veces de producción artesanal, pero que entre nosotros han llenado el vacío causado por la falta de medios especializados en la materia. Aunque con la aparición de Jarock de Café se creyó que por fin en el país habría una revista de rock, esta nunca llegó a estabilizar la frecuencia de su salida y después de solo tres números (¡en cuatro años!) que tuvieron muchos problemas en su circulación, al parecer desapareció.
De lo antes expuesto se comprenderá el significativo rol desempeñado por los fanzines, que si bien en muchos casos han tenido una proyección demasiado sectaria, en tanto expresión de una exclusiva filiación estética a determinada variante del rock, eso no es óbice para reconocer que gracias a ellos ha quedado registrado para el futuro en letra impresa lo sucedido en la escena roquera cubana, y de un tiempo hacia acá, también han sido introducidos en diversos sitios o webzines del ciberespacio.
Nombres como Death Through Your Veins, La Plaga, Evilness, Ilusión, Rottenraven, The Real Thing..., estuvieron entre los iniciadores del movimiento de fanzines que hay hoy en todo el país y que recientemente ha estado representado, entre otros, por Fuerza de Voluntad, Suffering, Mega Heavy, Polilla en la Sombra, Spirit Bloody Spiritus, Barrio Bajo, Cannibal, Turbulencia, Insanedrac, Resistencia, Scriptorium y El Punto Ge.
Desde estas páginas en alguna ocasión he reseñado el contenido de uno que otro número de El Punto Ge, que ya tiene en la calle su sexta edición con material que siempre resulta oportuno, sobre todo, porque sus editores, Tony González y Jorge Luis Hoyos, poseen una visión muy plural del rock y tratan de que en los trabajos de su publicación no falte la polémica. Así, en perfecta armonía uno puede encontrar materiales que, en ecuménico espectro, abarcan desde Qva Libre, la Élmer Ferrer Band, Jottabich, Osamu Menéndez, Rainfall, Tenaz, Athanai, hasta Interactivo.
Por su parte, Scriptorium, el fanzine que llevan adelante los hermanos Alexander y Michel Sánchez Salazar, ha puesto en circulación diez ediciones. Como publicación, esta posee una clara orientación hacia el metal y sobresale por la elegancia con la que los jimaguas arman cada número. En el más reciente al que he tenido acceso, el diez, hay un trabajo que en especial recomiendo, el titulado Rocknunc@encuba.cult.cu, donde, a partir de lo que no dudo en catalogar como un ejercicio escritural de alto vuelo, Alexander y Michel analizan desde sus personales credos el panorama cubano del rock.
En la décima edición de Scriptorium aparecen entrevistas a bandas de nuestro país como Escape, Cry Out For, C-Men, Puertas Negras, Demencia y Radical OH. Hay también un tributo a Carlos Fornés y su programa radial Sabarock, que en el 2006 arriba a los 15 años de existencia. Igualmente se reseñan los festivales Metal HG 2005 (Holguín) y Revolución 2006 (Jaruco). No faltan las habituales secciones del fanzine, a saber Notinews, Qui Pro Quo, Fichados, Critizines, Scriptureños y Made in Cuba. Empero, creo que uno de los materiales que más capta la atención es el diálogo sostenido con los metaleros suecos Arch Enemy, una «conversa» que los amantes del metal no deben perderse.
Por último, sugiero a los interesados el número 15 de Ilusión, el fanzine más antiguo entre los que en la actualidad existen en el país. En su reciente emisión, el editor, Manuel Santín, nos da la oportunidad de entrar en contacto con las opiniones que en distintas entrevistas ofrecen las bandas Ánima Mundi, Tendencia, Dago y Porno para Ricardo. Se incluyen además reseñas de CDs y maquetas, así como abundante información sobre el acontecer roquero. Ahora bien, considero que el plato fuerte de la publicación es la sección Desempolvando archivos, incluida por vez primera en esta edición y donde se habla de numerosas antiguas grabaciones de grupos cubanos de rock, las cuales, en la mayoría de los casos, están olvidadas, o los jóvenes desconocen. En fin, estos y otros fanzines nos brindan lecturas que en general son altamente recomendables.