Frente al espejo
«Excelente comentario, estimado Luis, y muy actual (La ley delante, Luis Sexto, Coloquiando, 19 de febrero). En otra ocasión le manifesté que se está produciendo un desarrollo de la indiferencia, en tanto cierta gente teme por represalias de quienes son objeto de la crítica... Esta es una posición muy negativa y peligrosa en una sociedad donde se estipula por ley que todo es del pueblo.
«Verdaderamente hay quienes se consideran por encima de la ley o, algo peor, se creen que ellos son la ley, los dueños y los infalibles. El tema que has traído se presta para múltiples enfoques, descripción de experiencias y exigencias de cambios… Mucho respeto para usted y para JR». (Leonardo Barreras Capote)
«Me resulta muy positivo el abordaje de estos temas en los medios más importantes de nuestro país (De lo sublime a lo inaudito, Marianela Martín González, 21 de febrero). Poner el dedo en el punto siempre es importante… Los felicito. Los medios tienen que cumplir con su función reguladora y más en nuestra sociedad.
«Ahora bien, sigo con el mal sabor en las respuestas de directivos y funcionarios cuando se abordan situaciones que duelen… Olvidan que la institucionalidad que representan los faculta no para que nos anuncien las complejidades de los problemas, sino para que los enfrenten. De igual manera sé, que muchas soluciones (en lo material) hoy no son posibles o lo serán en la medida que seamos más eficientes, pero un buen trato, una buena imagen, una mesa limpia, un vaso que brille, los papeles en el cesto, eso no depende del bloqueo…». (Ledian Valle Mestre)
«¡Hola, Yoelvis! ¡Cien puntos para ti! Muy acertado tu artículo Admirable figura, acerca del piropo (Yoelvis Lázaro Moreno Fernández, 17 de febrero). Desde que comencé a leerlo, pensé: ese es el piropo... Quienes como yo peinamos canas, sabemos cuán halagüeño era simplemente vestirse y salir, y que le dijeran a una cualquier cosa agradable... A veces se trata de alguien que simplemente elogia o reconoce que uno se esfuerza por lucir bien, por “agradar”...
«Pienso que se debía rescatar eso; que las personas debían manifestarse cuando ven algo agradable... Muy acertado también eso de eliminar obscenidades… Aunque no esté exento de picardía, intrínseca a nosotros los cubanos, en el piropo hay elegancia, reconocimiento a algo especial… En general debemos elogiar todo lo que lo merezca.
«De veras causa nostalgia que el piropo no se emplee más. Debemos librar una campaña contra su muerte. No podemos dejarlo morir… Sigue así. Vas por buen camino». (Odesa Santacruz)