La epidemia de colera en Haití, desatada tras el terremoto que sacudió a la empobrecida nación caribeña en el 2010, dejó una secuela de miles de fallecidos. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:02 pm
La Organización Mundial de la Salud (OMS) manifestó que al menos 700 millones de personas no cuentan con la atención psicosanitaria adecuada, por lo cual presentará un Plan de Acción para la Salud Mental 2013-2020, que espera sea aprobado por los estados miembros durante la Asamblea Mundial de la Salud (AMS), durante su reunión esta semana en Ginebra .
Según refiere Telesur, teniendo en cuenta el borrador de la propuesta, el organismo internacional promueve la atención de los desórdenes mentales y neurológicos y no las enfermedades olvidadas como el chagas, el dengue, la tuberculosis o la malaria, que afecta principalmente a los países en desarrollo.
La intención del Plan es que todos los países concreten medidas de prevención, campañas informativas de conocimiento público y de la detección temprana, y el fortalecimiento de los centros de atención primaria.
El organismo argumenta que las enfermedades mentales y neurológicas representan el 13 por ciento del total de las dolencias mundiales y son una tercera parte de los casos de enfermedades no transmisibles en el mundo.
Refieren que cerca de 350 millones de personas en el mundo padecen depresión; 90 millones conviven con un desorden de abuso de sustancias; 50 millones padecen epilepsia; y 35,6 millones sufren Alzheimer y otras demencias.
Sin embargo las enfermedades olvidadas afectan a más de mil millones de personas en el mundo, la mayoría son pobres de las zonas rurales de los países menos desarrollados.
En 2012, el debate sobre estas enfermedades originó polémica puesto que se expuso la necesidad de crear una Convención que estableciera la obligación de contribuir con el 0,01 por ciento del Producto Interno Bruto de cada país a Investigación y Desarrollo de tratamientos para los trastornos mentales y neurológicas.
Los países latinoamericanos lograron imponer su criterio de que es esencial un mecanismo que regule y establezca objetivos de Investigación para enfermedades olvidadas, pero se pospuso la concreción del debate hasta 2016.
Katy Athersuch, vocera de la ONG Médicos Sin Fronteras consideró que esta decisión es una muestra más de la «desconexión» entre la urgencia del problema y el hecho que se posponga la decisión tres años.
Aunque están casi erradicadas en países occidentales, siguen causando miles de muertes en los países subdesarrollados. La investigación sobre estas sigue parada, ya que las principales compañías farmacéuticas no muestran interés en invertir dinero sobre medicamentos que no van a poder vender.
Según los cálculos de la Unión Europea, las enfermedades mentales provocan una pérdida de entre tres y cuatro por ciento del Producto Interno Bruto por falta de productividad; y el Foro Económico Mundial calcula que el coste de estas dolencias se eleva a más de 2,5 billones de dólares.
La AMS es el ente superior de la organización que anualmente marca las directrices de trabajo en ciertos períodos de tiempo.