Cuba exhibe este jueves resultados alentadores en su estrategia ambiental, mediante la implementación de varias estrategias que reducen el proceso de degradación de los suelos y los efectos de la sequía, informa Prensa Latina.
La mayor de las Antillas celebra el Día del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, con avances en proyectos de inmediatos y largo alcance como el Programa Nacional de Mejoramiento y Conservación de Suelos, el de Lucha contra la Desertificación y la Sequía y el de Producción de Materia Orgánica.
Como parte de la estrategia nacional también prosigue el desarrollo del Plan Turquino-Manatí, dirigido a repoblar las zonas montañosas y más intrincadas del país.
Con el propósito de contrarrestar el deterioro de los suelos, Cuba incrementó la cobertura boscosa y las fincas forestales integrales, y cuenta con un mapa de riesgo ante la desertificación y el perfeccionamiento del sistema de alerta temprana contra la sequía agrícola y meteorológica. También se aplica un sistema de monitoreo sobre la realización del control de plagas y enfermedades en los cultivos del país con el uso de productos naturales o biopreparados.
Los expertos siguen de cerca los procesos erosivos provocados por el alto grado de acidez, la elevada salinidad y sodicidad, la incidencia de la compactación y los problemas de drenaje, además de que se trabaja en la prevención de incendios forestales, la mayor causa de perjuicio en los bosques.
La reutilización de los residuales sólidos y líquidos de la agricultura cañera y no cañera quedó en desuso para evitar su incorporación como contaminantes de suelos y aguas.
Actualmente se dispone de una metodología para evaluar las áreas boscosas como sumideros de carbono, se acometen acciones en la agricultura urbana y en la reforestación de las fajas hidrorreguladoras de ríos y embalses.