El consumo de tabaco, el sobrepeso y los factores ambientales se asocian al envejecimiento precoz de la piel, asegura un estudio divulgado en la revista, Archives of Dermatology, refiere Prensa Latina.
También los pacientes que han sufrido un cáncer cutáneo presentan cambios prematuros en la dermis, como arrugas, flacidez y manchas, indica la investigación realizada por expertos de la facultad de Medicina de la Universidad Case Western Reserve (Cleveland, Estados Unidos).
Los especialistas analizaron los estilos de vida, tipo de piel y el historial de cáncer cutáneo de 65 parejas de gemelos idénticos -escogidos para este trabajo, dado que tienen los mismos genes, y poder valorar hasta qué punto influyen los elementos ambientales.
De esta forma observaron que no basta con protegerse de los rayos ultravioleta para retrasar los signos del fotoenvejecimiento, y que más del 40 por ciento de los cambios de la piel se deben a factores externos.
Los participantes que habían sufrido cáncer cutáneo tenían una puntuación de fotoenvejecimiento mayor que aquellos que no lo habían padecido, lo mismo sucedió con los fumadores y no fumadores, indicaron los autores del ensayo.
Asimismo aseguran que tener unos kilogramos de más afectan este proceso.