Que las nuevas generaciones son agentes de cambio y tienen el poder de contribuir a un mundo más conectado y solidario, en el que el conocimiento compartido sea la base para enfrentar los desafíos que vivimos, volvió a resonar en voz de los participantes en el programa Puente al futuro 2024, una iniciativa de intercambio de líderes juveniles de China y América Latina y el Caribe, que el fin de semana último concluyó en el gigante asiático.
Representantes de Cuba, Perú, Colombia, Chile, Venezuela, Brasil, Argentina, Honduras, México y China, coincidieron en que esta cita no solo permitió apreciar las similitudes que nos unen, sino además valorar las diferencias que nos enriquecen: China con su milenaria historia y su enfoque de innovación, y
América Latina, con su diversidad cultural y espíritu resiliente, ofrecen lecciones valiosas que pueden ser mutuamente beneficiosas.
En tal sentido, en una proclama del evento, sus delegados se comprometieron a establecer «lazos de hermandad y cooperación entre los países participantes» y a promover «la paz, la justicia social y el desarrollo de nuestras naciones». Además, asumieron la responsabilidad de impulsar «el diálogo y la agenda sobre asuntos de interés común para nuestros pueblos y sus jóvenes».
Durante los talleres, conferencias, coloquios, mesas redondas…, las causas más justas de nuestros pueblos tuvieron espacio y la de Cuba fue muy defendida no solo por los representantes llegados de la Mayor de las Antillas, sino por jóvenes como el peruano Joan Alfaro, quien dijo que el bloqueo genocida de Estados Unidos «debe ser eliminado, porque daña al pueblo e impide su desarrollo» o la venezolana Engerly Cueva, quien elogió «el extraordinario humanismo y la solidaridad de la Revolución Cubana».
Los diálogos interculturales entre jóvenes de diversas naciones son cruciales para aumentar el entendimiento mutuo y la amistad, aseguró Liu Kai, subsecretaria de la Federación Nacional de la Juventud del gigante asiático, quien añadió que «después de este puente estoy segura de que China y América Latina y el Caribe van a ser mejor, que seremos amigos muy eternos, y haremos realidad la construcción de una comunidad de destino compartido entre ambas partes».