Texto y Fotos .Jorge Luis Sánchez Rivera.
Pintan la belleza del arte en un movimiento, alzan los sueños en la elasticidad de un pie, regalan performances en la tensión de cada músculo y delicado gesto.
Es un conjunto perfecto. Saltos, curvas, fantasías, técnica, poses, actitud, control de mente y cuerpo y espacio.
Para aprender a volar se necesitan muchas horas de suelo, dicen. Es un universo sublime: la danza. ¿Puede captar entonces un lente tanta magia? ¿Acaso es posible encerrar en una imagen a los Ángeles de la danza?
Muchas Gracias a los bailarines Brenda, Talía, Camila, Milaidy, Jorge, Rafael y Alejandro por tanta entrega y pasión para lograr este fotorreportaje.