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Karel Guzmán no pudo contribuir en la ofensiva de su club. Autor: Tomada de su perfil de Facebook Publicado: 15/02/2022 | 09:29 pm
El Pabellón Polivalente de Craiova recibió ayer uno de los mejores partidos de la actual temporada de la Liga Nacional de Baloncesto de Rumania. El líder de la tabla clasificatoria y único club invicto en la justa, ACS U-Banca Transilvania Cluj-Napoca (18-0), enfrentó al tercer mejor ubicado, CSO Voluntari (14-2), en una de las semifinales de la Copa Rumana y el resultado final dejó muy claro las ambiciones de ambos conjuntos de adjudicarse el trofeo.
En los compases conclusivos se decidió el encuentro con veredicto favorable a la tropa de la ciudad de Voluntari, 80-81 (14-20, 23-20, 23-17, 20-24), en tanto en los derrotados se extrañó mucho el acostumbrado protagonismo del escolta cubano Karel Guzmán, quien esta vez como titular no anotó (dos tiros de campo) y consiguió dos rebotes en cinco minutos y medio de juego.
El gran hombre a la ofensiva por la parte vencedora, vigente campeona de este torneo de pequeño formato, fue el ala-pívot Vlad-Sorin Moldoveanu, autor de 22 puntos, 11 rebotes, tres triples y 11 tiros libres encestados en 12 oportunidades.
Por su parte, sobresalieron en el elenco del habanero el base estadounidense Giordan Lee Watson (17 unidades) y su coterráneo Patrick Neal Richard II (15 y seis rebotes).
Al finalizar el desafío, Mihai Silvășan, técnico del U-BT Cluj-Napoca, declaró al sitio web de su entidad que «fue un partido disputado. Jugaron mejor que nosotros y los felicito por eso. Estamos decepcionados, era uno de nuestros objetivos. No brillaron nuestros jugadores en términos de lanzamientos o intensidad. Puedes ganar tantos juegos consecutivos como quieras y luego perder el más importante. Esto es baloncesto y debe ser una lección para nosotros. Estamos frustrados de no jugar la final. Habrá un breve descanso en el que recuperaremos fuerzas.
«Nos espera una nueva fase de la temporada y debemos estar preparados. No entré al campo pensando que éramos vencedores desde el principio. Sabía que era un buen equipo y que harían todo lo posible para ganarnos. Traté de transmitir eso a los muchachos, pero aparentemente no lo hice muy bien como para ganar. No es una tragedia, seguimos adelante», aseguró el entrenador rumano.
El CSO Voluntari, que chocará este jueves en la disputa del título ante SCMU Craiova, con su éxito más reciente se desquitó de la derrota sufrida en septiembre pasado frente a la formación de Cluj-Napoca, en la porfía por la corona de la Supercopa de Rumania.
