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El béisbol, Patrimonio de la Cultura Nacional. Autor: Adán Publicado: 18/10/2021 | 08:51 pm
No puedo negar que cuando supe la noticia quien primero vino a mi mente fue ese querido amigo, Ismael Sené, quien nos dijo adiós sin poder ver su sueño consumado. El viejo, como muchos le decíamos cariñosamente, fue un incansable luchador porque se le diera al béisbol cubano la importancia y el honor que merece. Pienso que lejos de destapar rencores lo mejor es pensar que dondequiera que esté se sentirá muy contento de que finalmente el béisbol cubano, nuestra popular «pelota», haya sido declarada Patrimonio de la Cultura Nacional.
Hoy, el pasatiempo por excelencia de los cubanos recibirá esta distinción en el legendario estadio matancero de Palmar de Junco, donde según algunos especialistas se jugó béisbol por primera vez, de manera oficial, en nuestro país. Según el programa, la también legendaria orquesta Failde (dirigida ahora por uno de sus descendientes) acompañará al deporte de las bolas y los strikes en este emotivo suceso, como aquella primera vez.
El pasatiempo por excelencia de los cubanos ha sido declarado Patrimonio Cultural de la Nación.
Cabe decir que nunca es tarde si la dicha llega, y así es. Son muchos los motivos por los que el béisbol puede considerarse cubano ciento por ciento. Desde el día que María Teresa Blanco Santos, especialista del grupo de patrimonio cultural inmaterial del Consejo Nacional de Patrimonio de Cuba, dio a conocer la buena nueva, han sido muchas las personas que han opinado al respecto y todas desde el más profundo amor a ese juego que es la vida misma del cubano. Hasta quienes no saben nada de pelota, o simplemente no les gusta, lo incluyen en su léxico de manera incondicionada. Así me lo hizo saber un gran humorista y apasionado pelotero: Ramón Mustelier, cuando pedí para nuestras páginas su opinión al respecto: «No hay día en que no hablemos de béisbol de manera diáfana y cotidiana: Me quiso meter línea… Me puso en tres y dos… Eso es fly al queche… Se fue del parque… Le dio curva… Dale cuatro malas… Se viró pa’ primera… Lo sorprendió robando… Lo dejó con el bate al hombro…».
Alguien que practica y ama el béisbol, Luis Silva, el actor que encarna el popular personaje de Pánfilo, como viene de las matemáticas y otras ciencias exactas, «tiró» más para el análisis hematológico: «¡La pelota es una cosa que el cubano la lleva en la sangre, corre en vena»!
Mi amigo Norland Rosendo, periodista deportivo, en reciente artículo en JR llamó «jonrón de la identidad» a este grandioso nombramiento. Cada cual desde su óptica celebra y agradece la venia merecida a nuestro béisbol, esperando que no sea solo fiesta de un día, sino punto de partida para ponerle más corazón a eso que queremos tanto: nuestro deporte nacional. Octubre, décimo mes del año. Mes que incluye fechas en que celebramos el Día de la libertad y el Día de la Cultura Nacional, un gran momento para este inolvidable Grand Slam, este jonrón con bases llenas de la pelota cubana.
Son muchos los motivos por los que el béisbol puede considerarse cubano ciento por ciento.
