Las Tunas clama por su primera corona. Autor: Osvaldo Gutiérrez/ACN Publicado: 10/01/2019 | 09:02 pm
Veleidosos como son, los pronósticos en pelota dejan a veces a uno mal parado o en un solo pie. El segundo fue mi caso, pues auguré una final entre Villa Clara y Ciego de Ávila, pero los segundos me hicieron quedar mal, aunque no regalaron nada en su semifinal contra los Leñadores.
Por segundo año consecutivo los muchachos de Pablo Civil estarán en la discusión del título que nunca ha ganado un equipo de esa provincia en series nacionales. En la anterior temporada acariciaron el cetro, pero el sueño se ponchó en el noveno inning del séptimo juego ante los Alazanes de Granma; ahora, tras una temporada de ensueño y luego de doblegar a los avileños en solo cinco duelos, parecen más cerca de la corona.
De su ofensiva no hay nada nuevo que decir, está muy balanceada, con hombres de mucha disciplina en home, unos con muy buen tacto, otros de gran poder y algunos que combinan ambas virtudes con el madero. Lo aprovechan todo, corren como felinos entre las bases y buscan —lo digo por segunda vez seguida— turnos al bate de calidad, lo que la situación demande, y eso no es asunto de una campaña, sino de años entrenándose bajo conceptos modernos del béisbol.
Su rotación es más sólida que la temporada anterior, con Yoanni Yera, Erly Casanova, Dariel Góngora y Leandro Martínez; mientras a su bullpen llegó un avezado abridor que ha tenido un debut a lo grande como taponero: Yoalkis Cruz, quien salvó dos y ganó uno ante los Tigres, pero lo más importante es lo bien que lució en esa función.
Salvo el segundo juego, los demás fueron reñidos. Tres se decidieron por la mínima, incluso uno de ellos en 14 innings; otro estuvo 4-3 hasta el noveno episodio; y el único que perdieron los tuneros se quedaron a un batazo de empatarlo o remontarlo.
Como en la postemporada de la Serie 57, han enseñado capacidad para jugar partidos tensos, y esa es una virtud de la que no muchos pueden ufanarse en Cuba actualmente.
La afición de los naranjas quiere celebrar su sexto campeonato.Foto: Carolina Vilches.
Pero los muchachos de Pablo Civil tendrán enfrente a unos Leopardos que por oncena vez asisten a una final. Molieron sin piedad a los Gallos de Sancti Spíritus en cinco juegos que pudieron ser cuatro, y su pitcheo, el arma mortal del equipo durante toda la temporada, fue inmenso con un Freddy Asiel Álvarez dispuesto a ponerse los galones de primer jerarca en el staff por resultado más que por nombre.
Al tándem Freddy Asiel-Alaín Sánchez se han sumado Misael Villa y Yosvani Torres para las aperturas, y el bullpen exhibe variedad, juventud y talento con Pablo Luis Guillén, Javier Mirabal, Ronny Valdés y el cerrador holguinero Wilson Paredes, cuyo nombre no decía mucho hasta hace poco de su gran calidad.