La exhibición del ciefueguero Robeisy Ramírez (derecha) recordó sus mejores momentos. Autor: Ariel Cecilio Lemus Publicado: 19/12/2017 | 02:59 pm
SANCTI SPÍRITUS- Los representantes de Camagüey irán hoy en busca de su séptima corona consecutiva en los torneos nacionales de boxeo Playa Girón, luego de colocar a tres de sus púgiles en la final de la 56ta edición, que este año acoge la provincia de Sancti Spíritus.
Dos de ellos serán Johanys Argilagos y Damián Arce, quienes se medirán en los minimosca, mientras que el capitán Julio César La Cruz (91 kg) cerrará la actuación de los camagüeyanos en busca del oro, instancia que alcanzó sin gran esfuerzo al imponerse a Yusel Nápoles, también oriundo de la tierra del Mayor.
Tal y como está la tabla de posiciones, los agramontinos son virtuales ganadores, pues con 38 puntos marchan a la cabeza seguidos de La Habana (30), y teniendo en cuenta que en los 49 ganará sí o sí un hijo de esa provincia central, todo está a su favor para reinar una vez más.
Como parte del cartel semifinal efectuado ayer, la mañana en la Sala Yara estuvo tuvo su clímax cuando sucedió el doble enfrentamiento entre espirituanos y habaneros, en donde los visitantes Agnolis Biñote (56) y Armando Martínez (60) sacaron dos controvertidos triunfos ante Jorge Griñán y Darieski Palmero.
Ambos, los cuadriláteros y la grada, quedaron al rojo vivo luego atestiguar dos duelos de incesante intercambio, cuyos discutibles resultados permitieron a La Habana definir el match entre ambas provincias, que habían llegado a semifinales con nueve hombres: cinco capitalinos y cuatro yayaberos.
El estelar cienfueguero Robeisy Ramírez (56 kg) dio contra Osvaldo Díaz (SSP) su mejor demostración tras el retorno al alto nivel, una grata noticia para el deporte cubano de cara al comienzo de este ciclo olímpico.
Robeisy se mostró seguro y efectivo en un combate durante el cual fue exigido por su rival, síntoma más que claro de su recuperación, y que a la vez significa una excelente noticia para el boxeo cubano de cara al ciclo olímpico.
Más tarde, en los 52 kilogramos, Yosbani Veitía no pudo dar su mejor versión ante el camagüeyano Raicel Moncada, aunque su efectividad ofensiva y paciencia sobre el ring le bastaron para conseguir el único triunfo local en las semifinales.
De nuevo el villaclareño Osvary Morrell presentó sus credenciales en los 81 kilos, para superar sin excesos al guantanamero Ernesvadi Begué y convertirse en un futuro próximo en digno sucesor de esa exitosa división.
Una de las mejores peleas del torneo fue la que protagonizaron Yoandri Toirac (HAB) y José Ángel Larduet (SCU) en los superpesados. Ambos mastodontes se enzarzaron en un incesante mano a mano, que a pesar de definirse 4-1 en favor del oriundo de Santiago de las Vegas, mantuvo en vilo a todos los presentes en el recinto deportivo.
En la final de la división se reeditará entonces el encuentro definitivo de 2012, momento en que el habanero venció 18-12 al reincorporado Savón (GTM), que este martes dejó fuera de combate al holguinero Geovannis Bruzón con un derechazo al mentón durante el mismo primer asalto.