Los jueces decidieron la suerte de Reinieris. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 06:36 pm
Hasta ahora había sido el arbitraje en el boxeo el más criticado en estos juegos, pero después de ver el desenlace que marcó la derrota del luchador Reinieris Salas (86 kilogramos) en el certamen de estilo libre, hay que pensar que no solo sobre el ring se cuecen habas.
El más notable gladiador entre nuestros libristas abrió con triunfo de 5-4 sobre el sudcoreano Gwanuk Kim, pero capituló por 3-5 ante el turco Selim Yasar, quien avanzó lo suficiente como para abrirle las puertas del repechaje. Ya en esa instancia, Reinieris sometió al boricua Jaime Espinal, plata hace cuatro años en Londres. Y luego se enfrentó al estadounidense Michael Cox J’Den… y al árbitro.
Muy pocos entendimos la decisión del principal y mucho menos la del panel de jueces que, tras examinar el video, dieron la razón a la reclamación de los entrenadores norteños. Tampoco la entendió Salas, quien visiblemente contrariado optó por renunciar a los seis últimos segundos del combate.
Los periodistas cubanos intentamos contactar a los protagonistas, pero fue imposible. Hablamos con algunos federativos, quienes tan confundidos como nosotros, no podían entender cómo habían interpretado ahora las reglas, tan cambiantes año tras año en nombre del buen espectáculo.
Sin dudas, una mancha más que priva a un atleta cubano de luchar por su sueños, pero que también empaña la imagen de una disciplina que estuvo a punto, por cosas como esta, de perderse estas fiestas.