Lisandra dio muestras de coraje sobre la pista. Autor: Roberto Morejón Guerra Publicado: 21/09/2017 | 06:14 pm
TORONTO.— Que Lisandra Guerra, una de las ciclistas más rápidas de América, se cayó estrepitosamente en los cuartos de finales de la velocidad individual, no es noticia. Que mucha gente en Cuba y aquí estaba pendiente de ella, de cómo evolucionaba, tampoco. Pero que con quemaduras y astillas de madera incrustadas en el brazo derecho quería seguir compitiendo y casi hubo que «amarrarla» para que desistiera, sí lo es. Otra en su lugar hubiera corrido para el hospital sin mirar más al velódromo en esos momentos.
«Yo quería continuar. Más que en el dolor que sentía, pensaba en la medalla, en la final, en la revancha con la canadiense Monique Sullivan», comentó la matancera.
—Algunos dicen que los jueces debieron descalificar a la mexicana Luz Gaxiola en ese heat, ¿qué crees?
—Bueno, para serte franca, ella hizo movimientos bruscos, ilegales, y me caí. Ya yo había ganado el primer heat y con ese aseguraba el pase a la semifinal. Era lo justo, aunque no me hubiera presentado después.
«Pero el arbitraje no ha estado como debiera. En la final de keirin, Sullivan se salió varias veces de la línea de carrera y ellos no la vieron, o mejor, no la quisieron ver, reclamamos y todo, pero hicieron caso omiso».
—Tienes una sutura de cinco puntos. ¿No te afectó el músculo?
—Afortunadamente no, solo eso, y dolor, pero soportable, yo estoy acostumbrada a esos dolores.
—¿Te han sorprendido los resultados de las canadienses?
—La verdad es que han estado muy fuertes, demasiado diría yo, fíjate que tanto mujeres como hombres han bajado más de un segundo en sus especialidades en tres meses y medio, y eso en el ciclismo es casi imposible, no se puede explicar.
—Es un velódromo nuevo, construido para los Juegos, ¿está rápido?
—No es una pista lenta, pero tampoco es rápida. Para lo que sí está bueno es para entrenar. No se compara con el de Xalapa, donde tuvieron lugar los Juegos Centroamericanos y del Caribe el año pasado. Aquel es mucho mejor.
—Antes de venir para Toronto estuviste en Europa unos meses, ¿cómo te fue por allá?
—Bastante bien, entrené y competí en eventos que me aportaron unos cuantos puntos para el ranking mundial. Ahora, a seguir preparándome para las futuras competencias, entre ellas, la Copa del Mundo y el Campeonato Mundial. Aspiro a participar en las Olimpiadas de Río de Janeiro-2016.